Fijación de precios de agroexportación con neuromarketing
El artículo «Cómo aplicar el neuromarketing para fijar precios de agroexportación» analiza cómo esta disciplina de marketing, basada en el funcionamiento del cerebro humano, puede optimizar las estrategias de precios para las empresas agroexportadoras. Al comprender cómo los consumidores toman decisiones y qué factores influyen en su percepción de valor, los exportadores pueden maximizar el atractivo de sus productos y aumentar su competitividad en el mercado internacional.
El neuromarketing ofrece un abanico de herramientas para lograr este objetivo. Una de ellas es el precio señuelo. Esta estrategia consiste en presentar un precio adicional que actúe como referencia y haga que la opción deseada parezca más atractiva. Por ejemplo, una empresa exportadora de frutas exóticas podría ofrecer mangos a $10 por kilogramo y, como señuelo, incluir una opción de «calidad premium» a $12 el kilo. Al comparar, los consumidores tenderán a percibir los mangos de $10 como una mejor oferta en relación calidad-precio, aumentando las probabilidades de compra.
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Otra estrategia valiosa es realizar estudios de mercado y pruebas de percepción. Estos estudios permiten a los exportadores conocer qué elementos del producto o marca influyen más en la decisión de compra de su mercado objetivo. Aspectos como el empaque, el etiquetado e incluso la historia de la marca juegan un papel importante en la percepción de valor. Un diseño atractivo del empaque o una historia de marca que transmita valores como tradición y calidad familiar pueden inclinar la balanza a favor del producto.
El neuromarketing también se aprovecha de sesgos cognitivos para influenciar la percepción del precio. Un ejemplo claro es la estrategia de precios que terminan en «nueve». Se ha comprobado que los consumidores tienden a redondear hacia abajo los precios que terminan en este dígito. Así, un precio de $3.99 para un producto como la quinua se percibirá psicológicamente más cercano a los $3 que a los $4, aumentando las intenciones de compra.
Para una estrategia de precios integral, el neuromarketing recomienda ofrecer una variedad de productos con precios diferenciados. Esto incluye incorporar un producto estrella o «premium» con un precio más alto que sirva como ancla. Al presentar luego productos similares a precios más bajos, se genera un efecto contraste que hace que la opción de gama media parezca más atractiva en comparación con el ancla. De esta forma, se incrementan las ventas de todos los productos y se refuerza la percepción general de valor.
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El neuromarketing brinda a los agroexportadores un conjunto de herramientas para mejorar la efectividad de sus estrategias de precios. Al comprender el comportamiento del consumidor y aplicar técnicas como precios señuelo, estudios de mercado, precios con terminación en nueve y productos ancla, las empresas pueden incrementar el atractivo de sus productos, aumentar sus ventas y ser más competitivas en el mercado global.