La inteligencia artificial (IA) está revolucionando la gestión de instalaciones, transformando la manera en que las empresas operan en este sector. A medida que la demanda de soluciones más eficientes, sostenibles y adaptadas a las necesidades cambiantes del mercado crece, es crucial que las organizaciones integren estas tecnologías emergentes en sus operaciones. Según un estudio de MarketsandMarkets, se estima que el mercado global de IA en facility management alcanzará los 1,980 millones de dólares para 2028, con una tasa de crecimiento anual compuesta del 28.6%. Este crecimiento subraya la importancia de la IA como herramienta clave para mejorar la precisión y eficiencia en la gestión de instalaciones.
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Para capitalizar los beneficios que ofrece la inteligencia artificial, Richard Lira, Jefe de Proyectos de Tgestiona, propone cinco estrategias fundamentales. La primera estrategia es la automatización estratégica, que implica identificar tareas rutinarias, como la gestión de mantenimiento y el monitoreo de recursos, para delegarlas a la tecnología. Esto no solo reduce costos y tiempos operativos, sino que también permite al personal concentrarse en actividades de mayor valor agregado, mejorando así la eficiencia organizacional.
La segunda estrategia se centra en el aprovechamiento de datos en tiempo real. Implementar sistemas de IA que procesen grandes volúmenes de datos permite mejorar la toma de decisiones y facilitar la gestión preventiva de las instalaciones. Esto garantiza el monitoreo constante del estado de los activos, lo que permite ajustes proactivos en las operaciones para prevenir fallos costosos o ineficiencias. Asimismo, la integración de IA con dispositivos de Internet de las Cosas (IoT) es crucial, ya que permite supervisar sistemas críticos como HVAC y suministro de energía, optimizando su funcionamiento y contribuyendo a la sostenibilidad al reducir el riesgo de fallos.
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Una transición exitosa hacia la adopción de la IA también requiere la formación del personal en competencias digitales y herramientas tecnológicas avanzadas. Preparar a los equipos para el uso de estos nuevos sistemas es esencial para garantizar una adopción efectiva y mejorar la eficiencia operativa. Por último, la ciberseguridad se convierte en una prioridad al manejar grandes volúmenes de datos sensibles; por lo tanto, es fundamental implementar medidas robustas para proteger la información, como el cifrado y el monitoreo constante de amenazas. Estas estrategias son clave para que las organizaciones lideren el cambio en el sector y aprovechen al máximo el potencial de la inteligencia artificial en la gestión de instalaciones.
