La distribución española de gran consumo ha demostrado una notable capacidad para garantizar la disponibilidad de productos en los lineales, superando los niveles previos a la pandemia y posicionándose como líder en comparación con otros países europeos.
Según el último «Barómetro OSA», elaborado por Aecoc en colaboración con NIQ, la tasa de disponibilidad de productos en los puntos de venta españoles alcanzó un 96% durante el primer semestre de 2024, lo que representa un aumento del 0.3% en comparación con el mismo periodo del año anterior. Este dato refleja la solvencia de la cadena de valor española y la eficiencia de los procesos logísticos y de reposición.
España Lidera en Disponibilidad de Productos
El informe destaca el excelente desempeño de algunas categorías de productos, como la pastelería y bollería industrial, los yogures y los cereales de desayuno, que presentaron los ratios de disponibilidad más altos. Por otro lado, aunque con niveles ligeramente inferiores a la media, productos como la cerveza, la leche y el agua también mostraron una buena disponibilidad.
Al analizar los datos por secciones, se observa que droguería y perfumería, productos frescos y alimentación envasada fueron las áreas con mejores resultados, mientras que las bebidas registraron los índices más bajos de disponibilidad.
Vea también: Crece la ocupación en la logística y el transporte
Un aspecto fundamental para garantizar la satisfacción del consumidor es la rapidez con la que se reponen los productos faltantes en los lineales. En este sentido, España destaca por su capacidad de recuperación, con una media de 2.7 días para reponer el stock, lo que la sitúa por encima de países como Estados Unidos, Francia y Gran Bretaña.
Factores Clave Detrás de este Éxito
Varios factores han contribuido a este destacado desempeño de la distribución española:
- Colaboración entre los actores de la cadena de suministro: La estrecha colaboración entre fabricantes, distribuidores y retailers ha sido fundamental para optimizar los procesos y mejorar la eficiencia.
- Inversión en tecnología: La adopción de tecnologías avanzadas, como sistemas de gestión de inventario y análisis de datos, ha permitido a las empresas mejorar la precisión de sus pronósticos y optimizar la gestión de la cadena de suministro.
- Adaptación a las nuevas demandas de los consumidores: La creciente demanda de productos frescos, saludables y personalizados ha impulsado a las empresas a desarrollar soluciones innovadoras para satisfacer las necesidades de los consumidores.
Los Desafíos del Futuro
A pesar de los resultados positivos, la distribución española sigue enfrentando desafíos, como la volatilidad de la demanda, los cambios en los hábitos de consumo y la creciente competencia. Además, la crisis sanitaria y económica global ha puesto de manifiesto la importancia de contar con cadenas de suministro resilientes y flexibles.
Vea también: Mercadona consolida su liderazgo
La mejora en la disponibilidad de productos en los lineales de la distribución española es una señal positiva que refleja la eficiencia y la adaptación de la cadena de valor a un entorno cada vez más dinámico y exigente. Sin embargo, es fundamental continuar trabajando en la optimización de los procesos y en la innovación para mantener este nivel de servicio y seguir satisfaciendo las necesidades de los consumidores.