Desvelando los secretos de cuáles son los productos más robados en supermercados españoles
Los supermercados, ese escenario cotidiano donde realizamos nuestras compras, han experimentado un notable aumento en los hurtos en los últimos tiempos, llevando a las cadenas a intensificar sus medidas de seguridad. Un estudio de The Source Tagging Company (STC), especializada en sistemas de protección de productos en el punto de venta, revela que el 40% de los hurtos en supermercados corresponden a alimentos.
De acuerdo con el Barómetro del Hurto en la Distribución Comercial, elaborado por la Asociación de Fabricantes y Distribuidores (Aecoc) y Checkpoint Systems, las pérdidas por «desapariciones misteriosas» representan el 0,9% de la facturación total de los retailers en España, generando una pérdida anual de 2.278 millones de euros. El estudio destaca que el embutido lidera la lista de productos más robados en el sector alimentario, seguido por el vino, licores y aceite de oliva.
Sin embargo, el robo de productos no es homogéneo en todo el país, ya que cada comunidad autónoma muestra preferencias distintas. De este modo, el pulpo es el protagonista en los hurtos en Galicia, mientras que en Madrid los helados son los más codiciados, y en Andalucía, el queso se lleva el podio. Factores como hábitos alimenticios, cultura, precios y hasta el clima influyen en las elecciones de los «ladrones de supermercados».
Medidas Creativas para Contrarrestar los Hurtos
Ante esta creciente problemática, los supermercados han adoptado medidas creativas y diversas para disuadir a los infractores. En Málaga, un establecimiento ha optado por poner candados en las botellas de aceite, buscando dificultar el hurto de este popular artículo. En Sevilla, han implementado una estrategia visual, llenando las estanterías con imágenes de las botellas de aceite y entregando la original en la caja.
Salvador Cañones, socio-director de STC, señala que la industria anticipa un continuo crecimiento de los hurtos, motivado por la menor disponibilidad económica y la creación de necesidades que no pueden ser ignoradas. Cañones apunta que, aunque priorizamos el pago de gimnasios, teléfonos móviles o plataformas digitales, en la compra diaria es fácil distraer algunos productos, ya sean necesarios o de placer.
Además, según la Organización de Consumidores y Usuarios (OCU), la cesta de la compra se ha encarecido en más del 30% en los últimos dos años. Paralelamente, la Confederación Española de Organizaciones Empresariales (CEOE) informó que los robos dirigidos a minoristas aumentaron un 30% en 2022 y otro 12% en 2023. Estos datos sugieren que el encarecimiento de la cesta de la compra podría ser uno de los motivos del incremento de los hurtos en los supermercados.
El Desafío del Encarecimiento de la Cesta de la Compra
En consonancia con la información proporcionada por la OCU, el encarecimiento del costo de vida se refleja en el aumento de más del 30% en el valor de la cesta de la compra en tan solo dos años. Este fenómeno, combinado con la situación económica y los cambios en los hábitos de consumo, crea un contexto propicio para el incremento de los hurtos en supermercados.
Por otro lado, la CEOE alerta sobre el preocupante incremento de robos dirigidos a minoristas, situando el aumento en un 30% en 2022 y un 12% adicional en 2023. Este panorama pone de manifiesto la necesidad de abordar no solo la seguridad en los supermercados, sino también los factores económicos y sociales que contribuyen a este fenómeno.
En conclusión, el fenómeno de los hurtos en supermercados es complejo y multifacético, con productos específicos liderando las estadísticas de robo en diferentes regiones del país. Las medidas de seguridad creativas y la anticipación por parte de la industria son pasos hacia la mitigación de este problema, pero abordar las causas subyacentes, como el encarecimiento de la cesta de la compra, también es esencial para garantizar la seguridad y sostenibilidad económica en el sector de la distribución comercial.