Crisis económica en Argentina: El 90% de los consumidores cambió sus hábitos
La situación económica en Argentina ha llevado a un cambio masivo en el comportamiento de compra de los consumidores. En la actualidad, el 90% de los argentinos han modificado sus hábitos de consumo como respuesta a la inflación y la pérdida de poder adquisitivo, según varios informes recientes. Estos cambios reflejan un panorama de consumo cada vez más enfocado en la planificación, la búsqueda de ofertas y la optimización del presupuesto disponible, y están generando nuevas tendencias de mercado en el país.
La investigación realizada por supermercados DIA muestra que, debido a la crisis, la mayoría de los consumidores han adoptado un enfoque mucho más planificado en sus compras. El 66% de los argentinos se concentra en adquirir productos esenciales y económicos, seleccionando cuidadosamente aquellos productos de mayor prioridad para sus necesidades básicas. Los descuentos y las promociones han pasado a ser determinantes a la hora de realizar una compra, ya que estos representan una oportunidad para optimizar cada gasto.
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Un hallazgo relevante es que alrededor del 20% de los encuestados compra exclusivamente productos que se encuentran en la franja de los precios más económicos, mientras que un 9.5% se limita a comprar únicamente artículos esenciales. Este cambio drástico no solo refleja la falta de poder adquisitivo, sino también un nivel de preocupación creciente por maximizar cada peso invertido en la compra de alimentos y productos de primera necesidad.
La estrategia de las promociones y las tiendas físicas
En un contexto de crisis, los consumidores tienden a preferir la tienda física por sobre los canales de compra en línea. Más del 60% de los encuestados en el estudio de DIA afirmó que encuentran mayor ahorro comprando en tiendas de proximidad en comparación con las compras en línea, que representaron solo un 16%. La mayoría de las personas organizan sus compras basándose en los días en los que se ofrecen promociones, aprovechando estos días para hacer compras de mayor volumen.
La estrategia de comprar en tiendas de proximidad no solo se enfoca en el ahorro monetario, sino también en la cercanía y accesibilidad que estas tiendas ofrecen. En tiempos de crisis, la conveniencia de las tiendas físicas, que frecuentemente ofrecen precios más competitivos y promociones, se convierte en un aspecto prioritario para los consumidores. Además, se observa un incremento en la compra de marcas propias, que suelen ofrecer precios más bajos y permiten un ahorro considerable en la compra total.
La «ingeniería» detrás de la compra
Otro informe, realizado por la consultora ShopApp, analizó en detalle la situación actual del consumo en Argentina y los mecanismos que los consumidores están empleando para maximizar su presupuesto. De acuerdo con el estudio, los argentinos han adoptado una estrategia de compras detallada, calculada y racional que les permite optimizar sus recursos. Esta «ingeniería» de consumo implica la búsqueda constante de precios antes de acudir al punto de venta y el uso de herramientas como billeteras virtuales, tarjetas prepagas y otros medios de pago que permiten acumular beneficios y descuentos.
El informe de ShopApp también reveló que los consumidores han desarrollado el hábito de hacer compras más pequeñas y frecuentes, lo que les permite un mayor control sobre sus gastos y una mejor administración de los recursos disponibles. La planificación es clave, ya que la mayoría de los consumidores prefieren hacer pequeñas compras en función de las promociones de cada día y esperan a que los productos de su interés estén en descuento.
La fidelidad de los consumidores argentinos hacia las marcas tradicionales también ha sufrido cambios significativos en este contexto. De acuerdo con el informe de ShopApp, el 83% de los consumidores en Argentina considera o ya compra productos de marcas propias, siendo Carrefour y DIA las más populares. Estas marcas propias suelen presentar una relación precio-calidad atractiva que responde a las necesidades de un consumidor cada vez más preocupado por estirar su presupuesto al máximo.
Este cambio en la fidelidad hacia las marcas refleja una tendencia de consumo enfocada en la funcionalidad y la economía, donde la calidad percibida de las marcas propias es suficiente para satisfacer las necesidades del consumidor promedio. La preferencia por marcas privadas no solo representa una oportunidad de ahorro para los consumidores, sino que también indica una adaptación a la realidad económica del país, donde muchas familias han tenido que ajustar su estilo de vida y renunciar a algunas marcas de renombre.
La relación entre la inflación y los nuevos hábitos de compra
Si bien la inflación en Argentina ha mostrado señales de desaceleración en los últimos meses, los consumidores siguen priorizando el uso eficiente de sus recursos. La experiencia inflacionaria de los últimos años ha dejado una huella profunda en los hábitos de compra de los argentinos, quienes ahora valoran mucho más las oportunidades de ahorro y el acceso a productos de buena relación calidad-precio.
La inflación no solo ha cambiado la forma en que los consumidores planifican sus compras, sino que también ha modificado la percepción del consumo como una actividad que debe ser cuidadosamente gestionada y controlada. Esto se observa en la creciente preferencia por promociones, la disposición de los consumidores a desplazarse entre varios puntos de venta en busca de ofertas y la falta de interés en comprar productos de lujo o de marcas costosas, a menos que se encuentren en oferta.
La tendencia de consumo en Argentina podría continuar en esta línea en el futuro inmediato. Es probable que los consumidores sigan prefiriendo las marcas propias y las promociones, al tiempo que mantendrán una postura cuidadosa y racional respecto a sus gastos. A su vez, las marcas deberán adaptarse a estas nuevas demandas del mercado y ajustar sus estrategias para satisfacer a un consumidor que cada vez está más dispuesto a cambiar de marca si esto representa un ahorro considerable.
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Empresas como Carrefour y DIA han comenzado a enfocarse en satisfacer las necesidades de un público que exige una buena relación calidad-precio. En este sentido, las marcas propias continuarán ganando terreno en la preferencia de los consumidores argentinos, y es probable que otros grandes retailers también adopten estrategias similares para adaptarse a esta nueva realidad.
La crisis económica en Argentina ha tenido un impacto significativo en los hábitos de consumo de los ciudadanos, quienes ahora planifican y racionalizan cada compra en función de promociones y descuentos. El cambio hacia un consumo más controlado y la preferencia por marcas propias son claros indicios de una economía que obliga a los consumidores a maximizar sus recursos y buscar alternativas más económicas. Este escenario plantea retos y oportunidades tanto para los consumidores como para las empresas, quienes deben adaptarse a una realidad en constante cambio.