Los Golden Globes han sido durante años una pasarela de moda memorable, donde las celebs se lucen con looks que marcan tendencia y despiertan opiniones encontradas. Anualmente, los fanáticos disfrutan comentando sobre los mejores y peores atuendos de la noche, creando un diálogo apasionado en torno a la moda. El año pasado, por ejemplo, Margot Robbie hizo girar cabezas con un vestido rosa de Chanel Couture, el cual generó tanto admiración como críticas. Este tipo de reacciones son comunes en el evento, donde cada elección puede convertirse en un tema de conversación importante.
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Entre los looks icónicos, destaca el vestido negro de Schiaparelli que llevó Rihanna en la edición de 2023, reflejando su estatus como ícono de moda en un evento que tradicionalmente resalta el glamour y la originalidad. Asimismo, Anya Taylor-Joy, con su vestido Dior en 2021, ha logrado consolidar su reputación de fusión entre el drama y la elegancia. Cada año, la atención también se centra en otras estrellas como Sandra Oh, cuyas elecciones de vestuario, como un impresionante diseño de Versace en 2019, muestran cómo ciertos colores y estilos pueden redefinir lo que se considera elegante en la alfombra roja.
Los Golden Globes de 2021 fueron especialmente inusuales debido a la pandemia, donde muchas celebridades, incluida Salma Hayek, optaron por looks impactantes desde la comodidad de sus hogares. En esa ocasión, Hayek eligió un vestido rojo de Alexander McQueen que dejó huella entre las opciones. A su vez, Lady Gaga, quien ha sido considerada una de las mejor vestidas, deslumbró en 2016 con un vestido negro de Versace, un ejemplo de cómo su estilo dramático siempre ha destacado en esta gala.
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Mirando hacia atrás, también se recuerda el notable vestido de corte moderno que Jennifer Lawrence eligió en 2016 y el elegante vestido blanco de Chanel que llevó Anne Hathaway en 2013. Emma Stone desafió las normas de la elegancia con un conjunto de pantalón negro y top brillante de Lanvin en 2015, demostrando que la definición de glamour es flexible y personal. Al mismo tiempo, figuras como Julia Roberts y Cynthia Erivo han dejado su marca con elecciones audaces, como el traje asimétrico de Stella McCartney y el vestido neón de Valentino Couture, respectivamente, consolidando la alfombra roja de los Golden Globes como un terreno fértil para la creatividad y el estilo. La anticipación por descubrir quién será el mejor vestido este año continúa alimentando el entusiasmo por el evento.