La historia de Roberto Verino en México es un claro ejemplo de cómo el fracaso y la perseverancia pueden entrelazarse para forjar un camino de éxito en la complicada industria de la moda. A dos décadas de su primer intento de penetrar en el mercado mexicano, la firma gallega ha recorrido un largo camino de aprendizaje que ha transformado su enfoque de negocio. Al principio, la marca se asoció con Liverpool, una de las cadenas de distribución más relevantes del país, pero el resultado no fue el esperado. La decisión errónea de este socio, unida a un formato de venta mayorista que no se alineaba efectivamente con la identidad de la marca, llevó a Verino a revaluar su estrategia en un mercado que prometía alto potencial pero que, en ese momento, no se materializaba en ventas efectivas. Este retroceso inicial no fue solo una pérdida, sino también una valiosa lección sobre la importancia de elegir el socio adecuado y entender las dinámicas de consumo locales.
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La segunda entrada de Roberto Verino en México, en 2018, marca un cambio radical y significativo en su enfoque. Al establecer su alianza con El Palacio de Hierro, la marca se permitió un mayor control sobre su presencia en el mercado, pasando a implementar un modelo de gestión más personalizado y adaptado. Esta adaptación fue crucial, ya que la compañía no solo revitalizó su imagen en el mercado mexicano, sino que también redefinió su estrategia de expansión. La creación de un equipo de gestión local dentro de esta nueva asociación ha permitido a la marca trabajar por rangos de precios y formatos de venta que resuenan mejor con el cliente mexicano. La importacia de comprender el mercado local y las preferencias de los consumidores, así como alinear estas con la propuesta de valor de la marca, se convirtió en la clave para el éxito en esta nueva etapa.
Dora Casal, directora ejecutiva de Roberto Verino, resalta la relevancia de un análisis profundo antes de entrar en un nuevo mercado y la necesidad de tener la capacidad de reaccionar rápidamente ante posibles errores. Este enfoque evidence la importancia de una investigación de mercado minuciosa, así como la evaluación de factores como el posicionamiento de la marca y su target. Con esta mentalidad, la firma ha sabido utilizar la experiencia adquirida en sus primeros años en el país para trazar un camino de crecimiento más sostenible y coherente. Este nuevo enfoque les ha dado la libertad de experimentar con estrategias diferentes, tales como la apertura de corners de venta y el desarrollo de franquicias, elementos que no estaban presentes en su plan original de expansión.
El recorrido actual de Roberto Verino en México, con 17 corners en El Palacio de Hierro y planes para la expansión durante los próximos años, abre la puerta a nuevas oportunidades en un mercado que, aunque ha enfrentado ciertas fluctuaciones, sigue siendo uno de los más importantes para la moda española. La reciente tendencia de la moda española ha visto una disminución en las exportaciones hacia México, lo que subraya la competitividad del mercado y la necesidad de las marcas de innovar y adaptarse. Sin embargo, la recuperación de Roberto Verino pone de manifiesto que con el socio adecuado y un modelo de negocio refinado, es posible avanzar y establecer una presencia sólida. Esto no solo beneficia a la marca sino que también da un mensaje esperanzador para otras empresas que buscan internacionalizarse, enfatizando que los errores pueden ser escalones hacia el éxito, siempre que se tomen en cuenta las lecciones aprendidas y se implemente un enfoque adaptativo.
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La experiencia de Roberto Verino en México es un testimonio del viaje de un empresario que ha sabido volver a levantarse tras un fracaso, utilizando cada tropiezo como una herramienta para afinar su estrategia y balancear sus operaciones. Lo que comenzó como un desafío en un mercado complejo se ha transformado en un modelo de aprendizaje y adaptación, donde el éxito se encuentra no solo en la expansión, sino en la creación de un entendimiento profundo del cliente y del entorno de negocio. La empresa ahora se posiciona no solo como un actor en la moda, sino como un referente en la construcción de una marca internacional que valora la cultura y las preferencias locales, integrando estas características en su oferta.