Elliott Hill, el nuevo consejero delegado de Nike, hizo su primera aparición ante analistas para abordar los recientes resultados de la compañía, que continuaron mostrando debilidades. A pesar de que Nike superó ligeramente las expectativas analistas, los resultados revelaron una caída del 8% en las ventas y una disminución del 26% en el beneficio neto durante el segundo trimestre de 2024. Esta presentación marca un periodo de transición para Nike, ya que Hill asumió el cargo en septiembre, sucediendo a John Donahoe, cuyas decisiones estratégicas han sido cuestionadas por el mercado. Con un tono motivador, Hill se propuso revitalizar la marca con un sentido de urgencia y un enfoque renovado en el deporte.
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Hill, quien cuenta con más de 32 años de experiencia en Nike, utilizó su primera conferencia para compartir sus observaciones iniciales tras dos meses en el cargo. Enfatizó la importancia de reconectar con empleados, consumidores y socios clave en el sector, y mencionó sus encuentros con diversas figuras y organizaciones en la industria del deporte, como la NBA y la NFL, para recoger información directa sobre la marca. Afirmó que el feedback de estos encuentros reveló una clara necesidad de que Nike reafirme su identidad y su conexión con el deporte, que considera fundamental para la compañía.
Durante su presentación, Elliott Hill delineó seis áreas de cambio necesarias para revitalizar Nike. En su opinión, la empresa ha perdido su obsesión por el deporte y ha dejado de poner a los atletas en el centro de sus decisiones, lo que ha afectado negativamente su innovación y diseño de productos. También mencionó que la marca ha estado más centrada en la captura de demanda en lugar de crearla, y que es vital volver a invertir en campañas de marketing que inspiran y conectan emocionalmente con los consumidores. Hill subrayó que la centralización de decisiones ha perjudicado a los recursos en mercados clave, un aspecto que prevé corregir al reestablecer la relación con los distribuidores y minoristas.
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En cuanto a acciones inmediatas, Hill destacó un enfoque renovado en cinco deportes clave: running, baloncesto, entrenamiento, fútbol y ropa deportiva. También anunció un retorno a un marketing de marca más audaz, incluyendo la colaboración con equipos icónicos y ligas deportivas para conectar emocionalmente con los consumidores locales. Aunque reconoció que algunas de las acciones propuestas pueden tener un impacto negativo a corto plazo en los resultados financieros, enfatizó que su visión es a largo plazo, con el deporte como eje central para el crecimiento sostenible y rentable de Nike.