LVMH amplía su exclusiva cartera de proveedores de lujo con la adquisición del relojero L’Épée 1839
El gigante francés del lujo, LVMH, ha sumado una nueva joya a su corona al completar la compra de la prestigiosa marca de relojería L’Épée 1839. Fundada en el siglo XIX por el relojero suizo Auguste L’Épée, la firma se destacó inicialmente por su innovación en cajas de música y luego se aventuró en la fabricación de relojes de viaje, que se convirtieron en un símbolo de elegancia entre las élites de la época.
Con sede en Delémont, Suiza, L’Épée 1839 fue adquirida en 2008 por Swiza, un fabricante de relojes con más de un siglo de experiencia. La empresa cuenta con un equipo de más de ochenta diseñadores, ingenieros y mecánicos, todos comprometidos con la excelencia artesanal.
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Esta adquisición marca un hito para la división de relojería de LVMH, creada recientemente. Frédéric Arnault, hijo menor de Bernard Arnault, lidera esta división y ahora supervisará la integración de L’Épée 1839 en el selecto grupo de marcas de lujo bajo el paraguas de LVMH.
No es la primera vez que LVMH expande su imperio. En 2023, adquirió el fabricante surcoreano de cerámica Ecco, y en 2011, se hizo con el proveedor de esferas ArteCad. El conglomerado, nacido en 1987 tras la fusión de Moët Hennessy y Louis Vuitton, sigue consolidando su posición como el mayor grupo de lujo del mundo.
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LVMH ha añadido un nuevo capítulo a su historia de éxito al incorporar a L’Épée 1839 a su cartera de marcas de lujo. Este movimiento estratégico refuerza su posición como líder indiscutible en el mundo del lujo y la elegancia.