El mercado de moda de lujo es uno de los sectores más rentables a nivel global, moviendo alrededor de 110,130 millones de dólares y proyectando un crecimiento de hasta 151,320 millones de dólares para el 2029, según un reporte de Mordor Intelligence. Aunque marcas como Hermès, Louis Vuitton y Christian Dior dominan el mercado, las personas más ricas del mundo suelen optar por casas de lujo menos reconocidas pero altamente exclusivas.
El conglomerado LVMH, que incluye marcas como Louis Vuitton, Christian Dior y Fendi, lidera el mercado de lujo gracias a su capacidad para combinar tradición, innovación y marketing estratégico. Sin embargo, estas marcas, aunque populares, no siempre son las favoritas de los ultra ricos.
Brunello Cucinelli es una de las marcas preferidas por los millonarios. Sus prendas, elaboradas con materiales como el cashmere, reflejan una estética sobria y elegante que atrae a la clase más rica de la sociedad.
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Stefano Ricci, especializada en ropa masculina de alta gama, utiliza tejidos de la más alta calidad y técnicas artesanales. Entre sus clientes se encuentran figuras como Nelson Mandela y Andrea Bocelli.
Cesare Attolini es conocida por sus trajes confeccionados a mano, apreciados por su ajuste perfecto y atención al detalle. Esta marca es una elección predilecta para personas de alto poder adquisitivo.
Loro Piana destaca por sus prendas de lujo que combinan suavidad y durabilidad. Figuras como Bill Clinton y David Beckham son parte de su clientela, valorando la calidad excepcional de sus productos.
Kiton representa la excelencia en la sastrería napolitana. Cada traje es el resultado de horas de trabajo manual, utilizando lanas ultrafinas y técnicas tradicionales que garantizan una prenda de calidad superior.
Brioni, famosa por sus trajes a medida, se enfoca en la elegancia clásica. Sus clientes incluyen figuras como Barack Obama, quienes valoran la sofisticación en su vestimenta.
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Mientras marcas como Gucci y Prada son asociadas con un estilo llamativo y ostentoso, las marcas preferidas por los ultra ricos priorizan la exclusividad y la calidad sobre la ostentación. Este enfoque minimalista y discreto es lo que las hace tan atractivas para este segmento.
Aunque marcas como Hermès y Louis Vuitton dominan el mercado de lujo, las personas más ricas del mundo suelen optar por casas de moda que priorizan la exclusividad y la artesanía. Brunello Cucinelli, Stefano Ricci, Cesare Attolini, Loro Piana, Kiton y Brioni representan el verdadero lujo silencioso, redefiniendo el concepto de moda premium.
