Louis Vuitton observaba a los viajeros. Es decir, a los consumidores. Dice la leyenda que se pasaba las horas mirándolos, preguntándoles. Tenía 16 años cuando llega a París, y empieza a trabajar como aprendiz en el taller de un fabricante de cajas y empacado. Es 1839. Llega a un París reinado por el último rey de Francia Luis Felipe I, pero el penúltimo de sus monarcas, ya que años más tarde Napoleón III Bonaparte se corona. Llega a un París a 32 años vista de que París estallara y se implantara la comuna, la primera experiencia histórica de la integración de un Estado proletario.
El taller es visitado por viajeros. Hacer maletas es un oficio valioso en una época de carruajes tirados por caballos y viajes en tren. Vuitton se convirtió rápidamente en un maestro de su oficio, aprendiendo a diseñar y fabricar cajas y baúles personalizados.
Y de ahí creó sus míticos baúles. No existe un lugar más bello para una marca que un baúl que recorre el mundo.
Vuitton solo tiene una foto, y está muy serio, porque antes estaba mal visto sonreír en las fotos. Nació el 4 de agosto de hace 2 siglos. Nació humilde, como todos los grandes del retail, Amancio, San walton, Juan Roig, Ingvar Kamprad…
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Pronto destacó y creó su propio negocio. Sus baúles eran excelentes. Vuitton amaba tanto lo que hacía que hizo construir 2 casas en el jardín que rodeaba su taller: quería estar lo cerca posible de su oficio.
En la guerra franco-prusiana, su taller fue saqueado y destruido, pero él volvió a reconstruirlo. Murió y nos dejó solo esa foto donde no sonríe. No sabía que había sido el padre de una de las marcas más grandes de todos los tiempos.
El hijo de Vuitton, Georges, patentó un innovador sistema de cerradura para los baúles. Las cerraduras eran tan buenas que retó a Harry Houdini a escapar de un baúl Vuitton cerrado. El escapista, que amaba los retos, pero no el ridículo, calló por respuesta.
Hoy, Louis Vuiiton es amado por los archimillonarios, nuevos ricos, y gente común que se dan caprichos porque lo valen.
Rapperos como Notorious BIG cantan”: “Louis Louis Louis can ‘ ¿Ves
cómo tu mundo me sorprende? «.
Roger Moore, Angelina Jolie, Jacqueline Kennedy Onassi , Kanye West, Catherine Deneuve, Lauren Bacall, Kim Kardashian, Sarah Jessica Parker, Rihanna, los Beckham… TodXs aman a Vuitton.
Audrey Hepburn, la mujer más bella de todos los tiempos sin ser la más bella, en 1965 encargó un pedido especial a Louis Vuitton: crear una versión de menor tamaño del bolso Speedy. Nace el Speedy 25. Un nuevo icono.
Audrey mira como ensimismada los escaparates de Tiffany, pero en
el fondo lo que a ella le gusta es su Speedy 25.
