Consumo de Productos para Mascotas Fabricados en EE. UU.
La tendencia de los dueños de mascotas a preferir productos fabricados en Estados Unidos ha crecido significativamente en los últimos años. Varios factores están influyendo en esta decisión, desde la calidad de los productos hasta el deseo de apoyar a la economía local y el compromiso de las marcas con la responsabilidad social.
Calidad y Seguridad de los Productos
Muchos consumidores buscan productos que garantizan mayores estándares de calidad y seguridad para sus mascotas. Claudia Loomis, de CB Pet Market, destaca que los productos masticables y las golosinas para mascotas que son «fabricadas en EE. UU.» a menudo se perciben como más seguras y más frescas que los productos importados. Esto se debe a que los ingredientes utilizados, provenientes de fuentes estadounidenses, no requieren un transporte extenso desde el extranjero, lo que puede comprometer la frescura y la calidad.
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Eric Emmenegger, director de marketing de Nulo, enfatiza que los consumidores desean ofrecer alimentos de alta calidad a sus mascotas, considerando que la frase «fabricado en EE. UU.» puede ser un símbolo de confianza. Esta confianza también es respaldada por percepciones de que los productos nacionales están «fabricados en cumplimiento de controles de calidad más rigurosos y supervisados federalmente que los productos importados», como señala Rob Cadenhead de Gott Pet Products. Esto coloca a los productos estadounidenses en una posición privilegiada en la mente del consumidor, que prioriza la salud de sus mascotas.
Diferenciación en el Mercado Minorista
Para los minoristas, tener un surtido de productos fabricados en EE. UU. puede ser una estrategia clave para diferenciarse de la competencia, especialmente frente a las grandes cadenas de tiendas. Pattie Zeller, de Animal Connection, menciona que muchos clientes esperan que los minoristas independientes ofrezcan productos nacionales, lo que les lleva a preferir comprar localmente en lugar de en tiendas de gran tamaño. Esta preferencia es parte de una tendencia más amplia en la que los consumidores quieren saber de dónde provienen los productos y cuáles son las prácticas de su producción.
«Utilizamos el ‘fabricado en EE. UU.’ como un punto de venta para productos de comida, ropa y equipos para mascotas cada vez que podemos», dice Zeller. Los consumidores tienden a sentirse más conectados con las tiendas que pueden ofrecer transparencia sobre el origen de sus productos, y esto se traduce en fidelidad hacia el minorista.
Interés por la Filantropía y Responsabilidad Social
Además de la calidad de los productos, hay un interés creciente en apoyar a empresas que comparten valores y demuestran un compromiso con causas sociales. Emmenegger explica que, a medida que los consumidores se vuelven más conscientes de las prácticas comerciales, muchos buscan marcas que no solo vendan productos, sino que también involucren iniciativas sociales que tengan un impacto positivo en la comunidad.Nulo, por ejemplo, se asocia con organizaciones que apoyan el bienestar animal y otras causas sociales, señalando su intención de contribuir activamente a la mejora de la sociedad. Esto resuena especialmente con los propietarios de mascotas más jóvenes, quienes están dispuestos a investigar y preferir marcas que lleven a cabo prácticas éticas y sostenibles.
Rob Cadenhead añade que Charlee Bear no sólo se enfoca en la calidad de sus golosinas, sino que también se compromete con la comunidad al proporcionar muestras de productos a refugios y organizaciones que trabajan con animales necesitados. Este tipo de compromiso no solo ayuda a las organizaciones, sino que también fortalece la lealtad del cliente hacia la marca.
Un Cambiante Panorama Comercial
Louisa Casto, del equipo de Jolly Pets, resalta la creciente importancia de la responsabilidad social en las decisiones de compra de los consumidores. Ella observa que los propietarios de mascotas buscan más que solo productos; quieren asegurarse de que las marcas que apoyan estén haciendo un impacto positivo en la comunidad. Desde prácticas de abastecimiento ético hasta compromisos de sostenibilidad, las empresas deben ser transparentes en sus esfuerzos y construir una conexión genuina con sus consumidores.
Zeller también señala que, como minorista, valora a los proveedores que permiten contribuir a la comunidad, ya sea a través de donaciones de productos cercanos a su fecha de caducidad o mediante la provisión de muestras para eventos locales. Esta colaboración no solo beneficia a las organizaciones comunitarias, sino que también refuerza la percepción de la tienda como un lugar que actúa en el interés de la comunidad.
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El interés por productos fabricados en EE. UU. por parte de los dueños de mascotas se basa en una combinación de factores que incluyen la calidad y frescura de los productos, la transparencia en los procesos de fabricación, y un fuerte sentido de responsabilidad social y ética empresarial. Las marcas que se posicionan claramente en torno a estos valores tienen más probabilidades de atraer y retener a un grupo de consumidores cada vez más consciente y comprometido. A medida que esta tendencia continúa creciendo, las empresas que ofrecen productos de calidad y que se involucran activamente en su comunidad estarán mejor posicionadas para prosperar en un mercado competitivo.