En el corazón de la pujante industria automotriz argentina, la Toyota Hilux emerge como un ícono de éxito y transformación. Con la celebración de la producción de la unidad número dos millones en la fábrica de Zárate, Toyota Argentina destaca no solo el logro numérico sino también el papel fundamental que la Hilux ha desempeñado en el cambio de paradigma en la fabricación y exportación de camionetas en el país.
Un inicio modesto y un crecimiento exponencial
La historia de la Toyota Hilux en Argentina se remonta a 1997, cuando la marca japonesa inició la producción de este modelo en su planta de Zárate. En sus primeros años, la producción anual era modesta, alcanzando las 10,000 unidades por año. Sin embargo, a medida que el tiempo avanzaba, la Hilux se consolidó como un pilar en la oferta de camionetas, y su impacto en la industria se hizo cada vez más evidente.
El punto de inflexión llegó con la llegada del nuevo milenio. En 2001, en medio de una crisis económica y social, Toyota anunció una inversión de 200 millones de dólares para modernizar y expandir su planta en Zárate. Mientras otras automotrices pausaban sus proyectos, Toyota avanzó con determinación, redefiniendo la narrativa de la industria automotriz en Argentina.
Récord de producción y evolución rápida
La evolución de la producción de la Hilux es notable. Para alcanzar el primer millón de unidades, se necesitaron 19 años; sin embargo, el segundo millón se logró en menos de ocho años, entre mediados de 2016 y fines de 2023. Con la actual tasa de producción de 200,000 unidades por año, se vislumbra que Toyota podría alcanzar el tercer millón en apenas un lustro. Este crecimiento exponencial subraya la creciente demanda y la posición consolidada de la Hilux en el mercado.
La transformación de Toyota en Argentina
Los primeros años de Toyota en Argentina fueron una fase exploratoria. Desde la llegada en 1993 hasta principios de 1996, Alberto Ibáñez, ex-ejecutivo del grupo Techint, lideró el establecimiento de la automotriz en el país. En 1994, adquirieron el estratégico predio de Zárate, donde comenzaron la instalación de una planta de producción de vehículos.
La inauguración oficial de la planta de Zárate tuvo lugar en 1997, y para entonces, Toyota de Japón ya había adquirido el 100% de su filial argentina. Inicialmente, la producción se centró en una versión más antigua de la Hilux, con una tasa de producción de 10,000 unidades anuales y un equipo de 500 operarios. Hoy en día, la planta emplea a 8,500 personas, subrayando el crecimiento sostenido y la contribución significativa de Toyota al empleo en Argentina.
Inversión en plena crisis y el impacto de la Hilux
El año 2001 marcó un momento crucial para Toyota y la Hilux en Argentina. En medio de la crisis, la automotriz anunció una inversión millonaria para modernizar la planta y lanzar una nueva generación de la Hilux, junto con su versión «Fortuner» o SW4. A pesar de las dificultades económicas, Toyota demostró su compromiso al avanzar con la inversión en Zárate en 2002, incluso cuando otras compañías detenían sus proyectos.
El lanzamiento de la séptima generación de la Hilux en 2004 fue un hito. Además de su innovador diseño, la Hilux se convirtió en el primer vehículo fabricado en Argentina con una lista de espera de dos a tres meses en las concesionarias de Brasil. Este éxito comercial no solo consolidó la posición de la Hilux en el mercado regional, sino que también desencadenó una transformación en la industria automotriz argentina.
Impacto en la industria automotriz Argentina
La Hilux no solo fue un éxito de ventas; también cambió la configuración de la industria automotriz en Argentina. Proporcionó escala de producción a diversas fábricas autopartistas que se especializaron en piezas para camionetas, creando un ecosistema industrial alrededor de este tipo de vehículo.
La llegada de la Hilux inspiró a otras marcas a ingresar al mercado de camionetas. Víctor Klima, ex primer ministro de Austria y en ese momento titular de Volkswagen Argentina, trajo la inversión para la Amarok, la primera pick up de la marca alemana en Argentina. Este fue solo el comienzo, ya que la industria local se expandió para incluir la Ford Ranger y la Renault Alaskan, transformando el panorama automotriz.
Con información de Clarín