La digitalización del comercio exterior: Un impulso para la competitividad en Uruguay
En un mundo cada vez más globalizado, la eficiencia en el comercio exterior se ha convertido en un factor clave para la competitividad de los países. En este contexto, Uruguay está dando pasos firmes hacia la digitalización de sus procesos aduaneros, consolidándose como un modelo de innovación en América Latina. La Ventanilla Única de Comercio Exterior (VUCE) ha sido una herramienta fundamental en esta transformación, generando un impacto positivo tanto en la economía como en la sostenibilidad del sector.
Un cambio significativo en la eficiencia operativa
La digitalización de los trámites aduaneros ha permitido una notable reducción de costos y tiempos de gestión. Según datos recientes, la optimización de la VUCE ha significado un ahorro de más de 114 millones de dólares para el sector privado y 43 millones de dólares para el sector público. Este avance ha sido especialmente beneficioso para empresas, despachantes de aduana y particulares, quienes han visto una disminución de costos operativos por cada trámite digitalizado.
Vea también: Nuevas disposiciones sobre el registro de software en Uruguay
Lucas Bianchi, CEO y fundador de Interborders, destaca que la transformación digital en el comercio exterior es un factor clave para la competitividad del país. «La simplificación y automatización de los procesos aduaneros no solo reduce costos, sino que también mejora la previsibilidad de las operaciones y fortalece la posición de Uruguay como un hub logístico estratégico en la región», señala Bianchi.
Interborders y su papel en la digitalización del comercio exterior
Interborders, una empresa de logística y carga internacional fundada en 2016 en Argentina, ha sido testigo del impacto positivo que tiene la digitalización en el comercio exterior. Con presencia en Chile, Estados Unidos, Panamá, Paraguay y Uruguay, la empresa ha apostado por la innovación y la transparencia como pilares fundamentales de su crecimiento.
La integración de herramientas digitales como la trazabilidad en tiempo real de cargas y la automatización del despacho aduanero ha permitido a importadores y exportadores optimizar tiempos y reducir la burocracia. Bianchi afirma que «Uruguay tiene la oportunidad de convertirse en un referente regional en eficiencia logística, siempre que continúe avanzando en la digitalización y en la implementación de un marco normativo claro y estable».
A pesar de los avances logrados, los costos logísticos siguen siendo un desafío importante para muchas empresas uruguayas. La reducción de tiempos de espera en puertos y zonas aduaneras es una ventaja tangible que permite a los empresarios operar con mayor eficiencia. Sin embargo, la inversión en tecnología y la modernización de la infraestructura son aspectos clave para consolidar esta tendencia.
Bianchi subraya que, mientras otros países de la región aún enfrentan problemas estructurales en sus sistemas aduaneros, «Uruguay está demostrando que la digitalización no es una tendencia futura, sino una necesidad actual». La coordinación entre agentes de carga, despachantes de aduana, transportistas y organismos gubernamentales ha mejorado notablemente gracias a la integración de plataformas digitales, reduciendo errores y aumentando la transparencia.
Vea también: La era de los minimercados inteligentes: Intelli Market llega a Uruguay
Para que Uruguay siga consolidándose como un referente en comercio exterior, es crucial que la digitalización continúe avanzando. La apuesta por sistemas automatizados, la mejora en la comunicación entre los actores de la cadena logística y el desarrollo de normativas que incentiven la inversión en tecnología serán fundamentales en este proceso.
El país tiene la oportunidad de fortalecer su posicionamiento en el mercado internacional y de atraer nuevas inversiones, convirtiéndose en un modelo de eficiencia operativa en la región. Si bien existen desafíos por superar, la digitalización del comercio exterior es un camino sin retorno que seguirá generando beneficios para las empresas y para la economía nacional en su conjunto.