El crecimiento de ingresos de Minerva en Uruguay enfrenta desafíos regulatorios
En el tercer trimestre de 2024, Minerva Foods, una de las principales exportadoras de carne de Sudamérica, mostró un crecimiento sólido en sus operaciones en Uruguay, a pesar de enfrentar obstáculos regulatorios importantes. Según los resultados financieros y operativos presentados la semana pasada, los ingresos brutos de Minerva en Uruguay crecieron un 9,3% interanual medidos en reales brasileños, destacándose como un componente clave de la expansión global de la compañía.
Este aumento en los ingresos se produce a pesar de una leve disminución del 3% en el volumen de ventas durante el mismo período. El desempeño positivo refleja la capacidad de la empresa para gestionar eficientemente sus operaciones y adaptarse a las condiciones del mercado, a pesar de las fluctuaciones en la oferta y demanda de carne vacuna a nivel internacional. Sin embargo, los desafíos regulatorios a los que se enfrenta en Uruguay podrían influir en su capacidad de expandir aún más sus operaciones en el país.
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El informe financiero también subraya un crecimiento significativo de las operaciones de Minerva en Uruguay durante los últimos 12 meses. Los ingresos brutos experimentaron un incremento del 19,6%, mientras que el volumen de ventas ascendió un notable 31%. Estos datos reflejan la recuperación de los mercados internacionales, con Estados Unidos y China como destinos principales para las exportaciones uruguayas de carne.
El mercado norteamericano ha mostrado una demanda constante, influenciada por dificultades en el ciclo ganadero local de Estados Unidos. Esto ha llevado a un aumento en las importaciones de carne vacuna, beneficiando a exportadores sudamericanos como Minerva. De manera similar, la recuperación del mercado chino ha sido un factor clave para el aumento de volúmenes exportados y la aceleración de los precios, creando un escenario favorable para la compañía.
En un movimiento para fortalecer su presencia global, Minerva concluyó en octubre de 2024 la adquisición de varias plantas productivas de Marfrig en Brasil, Argentina y Chile. Esta expansión aumentó su capacidad operativa con 13 nuevas plantas y un centro de distribución adicional. En total, Minerva ahora cuenta con 46 unidades industriales, lo que le permite procesar diariamente hasta 41.789 cabezas de bovinos y 25.716 ovinos.
La ampliación de su parque operativo no solo permite a Minerva incrementar su producción, sino también diversificar sus operaciones en múltiples mercados clave. Esta estrategia refuerza su posición como uno de los mayores exportadores de carne en la región, aprovechando la demanda creciente de los mercados internacionales.
A pesar del éxito financiero y la expansión operativa, Minerva enfrenta un desafío significativo en Uruguay relacionado con la adquisición de tres establecimientos industriales de Marfrig Global Foods. El 30 de octubre de 2024, la Comisión de Promoción y Defensa de la Competencia (Coprodec) mantuvo su decisión de no aprobar la adquisición, citando preocupaciones sobre el impacto que tendría en la competencia del mercado local de carne.
Esta decisión representa un obstáculo para la estrategia de expansión de Minerva en Uruguay, un mercado clave para sus operaciones en Sudamérica. La empresa ha indicado que está evaluando los términos de esta decisión y que presentará un recurso de apelación en los próximos días, tanto a nivel administrativo ante el Ministerio de Economía y Finanzas, como a nivel judicial. A pesar de la negativa inicial, la compañía sigue comprometida con buscar todas las vías posibles para revertir esta decisión y avanzar con su plan de expansión.
La negativa de Coprodec a aprobar la adquisición podría tener implicaciones significativas para el mercado uruguayo de carne. Si bien Minerva ha demostrado un sólido desempeño en términos de crecimiento de ingresos y expansión de mercado, la imposibilidad de adquirir estas plantas de Marfrig limitaría su capacidad para aumentar su producción local y competir más agresivamente en el ámbito internacional.
Para el sector ganadero de Uruguay, esta situación también presenta incertidumbres. Minerva es un actor importante en la cadena de valor de la carne en el país, y una expansión de sus operaciones podría haber implicado mayores inversiones, generación de empleo y un aumento en la capacidad exportadora. La decisión de Coprodec podría ralentizar estos beneficios potenciales, afectando tanto a la industria local como a la competitividad del país en los mercados globales.
A nivel global, Minerva continúa mostrando un desempeño robusto. En el tercer trimestre de 2024, los ingresos brutos consolidados de la compañía alcanzaron los R$ 9 mil millones, una expansión del 20% anual y un crecimiento del 11% en comparación con el trimestre anterior. Este crecimiento se debe en gran medida a la fortaleza de los mercados norteamericano y chino, así como a la expansión de la capacidad operativa tras las recientes adquisiciones.
La demanda de carne sudamericana sigue siendo alta, impulsada por factores como la recuperación económica post-pandemia, el aumento del consumo de carne en Asia y la falta de oferta interna en mercados como Estados Unidos. Estos elementos han creado un entorno favorable para las exportaciones de Minerva, que se espera continúen creciendo en el mediano plazo.
El desempeño de Minerva en Uruguay ha sido positivo en términos de ingresos y volumen de ventas, pero la negativa regulatoria representa un desafío importante para la compañía. La decisión de Coprodec de bloquear la adquisición de las plantas de Marfrig refleja preocupaciones sobre la concentración del mercado y la competencia justa, lo que podría tener implicaciones a largo plazo para la estrategia de crecimiento de Minerva en el país.
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A pesar de estos obstáculos, Minerva mantiene una postura optimista y sigue comprometida con su estrategia de expansión global. El recurso de apelación pendiente podría ser una oportunidad para revertir la decisión y avanzar con sus planes en Uruguay, lo que permitiría a la compañía capitalizar el fuerte crecimiento de los mercados internacionales y fortalecer aún más su posición como líder en el sector de la carne en Sudamérica.
El futuro de Minerva en Uruguay dependerá en gran medida de cómo evolucione este proceso regulatorio y de su capacidad para adaptarse a las normativas locales mientras continúa su expansión en otros mercados clave.