Los chocolates y las flores continúan siendo los regalos más emblemáticos en la celebración del Día de San Valentín, que se lleva a cabo cada 14 de febrero. Sin embargo, en los últimos años se ha observado un cambio significativo en las preferencias de los consumidores, quienes están cada vez más interesados en regalar experiencias y entretenimiento. Esta tendencia se apoya en el uso del marketing emocional, que busca establecer una conexión más profunda entre las marcas y sus clientes. Además, el comercio electrónico en el sector retail está mostrando resultados muy prometedores, con proyecciones de crecimiento de hasta un 15%.
El Día de San Valentín representa una fecha crucial para los comercios minoristas, ya que las ventas durante esta campaña, que se desarrolla principalmente en la primera quincena de febrero, se espera que aumenten en un 6% en comparación con el año anterior, alcanzando un total aproximado de S/ 612 millones. Esta información fue proporcionada por la Cámara de Comercio de Lima (CCL). Leslie Passalacqua, presidenta del Gremio Retail y Distribución de la CCL, resaltó que esta estimación supera las proyecciones iniciales del 5% y también se espera que el rendimiento del 2024 sea superior al del año pasado, lo que contribuirá a que las ventas totales del mes de febrero alcancen alrededor de S/ 1,600 millones.
Las proyecciones de crecimiento se sustentan en tres factores fundamentales. En primer lugar, la expansión de los centros comerciales ha permitido una mayor oferta de productos y servicios. En segundo lugar, el clima veraniego en el que se celebra este día fomenta el consumo. Finalmente, la diversificación de la campaña ha ampliado el público objetivo. Passalacqua indicó que actualmente, la celebración de San Valentín no solo se limita a parejas y amigos, sino que también incluye a las familias, quienes se reúnen para conmemorar esta fecha especial.
En cuanto al gasto promedio por persona, se estima que oscilará entre S/ 200 y S/ 280, lo que representa un aumento significativo en comparación con el año anterior, cuando el gasto promedio fue de entre S/ 190 y S/ 250. Este incremento, que varía entre un 5.26% y un 12%, refleja una mayor predisposición de los consumidores a gastar en esta temporada, lo que resulta positivo para los comercios minoristas.
Aunque los regalos tradicionales como chocolates y flores seguirán siendo los más demandados, la creciente inclinación hacia experiencias y entretenimiento está tomando fuerza. Reservar cenas en restaurantes, comprar entradas para el cine o el teatro, y participar en actividades de aventura son opciones que están ganando popularidad, especialmente a través de plataformas digitales.
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En el ámbito del comercio electrónico, este segmento representa entre el 8% y el 10% de las ventas totales en el retail en Perú, y su crecimiento es constante. Durante las celebraciones del Día del Amor y la Amistad, se estima que la facturación del comercio electrónico experimentará un aumento de entre el 10% y el 15% en comparación con el año anterior. Este crecimiento se atribuye a un aumento en la preferencia por las compras online, así como a la diversificación de categorías de productos y a la implementación de estrategias de marketing más personalizadas basadas en inteligencia artificial y análisis de datos.
Las expectativas comerciales para el Día de San Valentín en 2025 indican que las tendencias seguirán evolucionando hacia experiencias memorables, personalización y omnicanalidad. Passalacqua enfatiza la importancia de adoptar estrategias de marketing emocional que permitan conectar con los clientes a un nivel más profundo y crear historias significativas alrededor de las marcas. Esto incluye aprovechar los canales digitales para interactuar con la audiencia, generar expectativa y colaborar con otros negocios para ofrecer experiencias únicas.
Finalmente, se espera que para esta temporada se realicen colaboraciones con influencers, lo que permitirá generar un mayor engagement y fidelidad del cliente hacia las marcas. En este contexto, no solo se trata de vender productos, sino también de ofrecer emociones y experiencias memorables que resuenen con los consumidores.
Fuente: Revista Economía