Telefónica del Perú, que opera la marca Movistar en el país, ha decidido solicitar la entrada a un Procedimiento Concursal Ordinario (PCO) ante el Indecopi, debido a su incapacidad para cumplir con las obligaciones financieras que ha acumulado en los últimos años. Esta situación se ha vuelto una preocupación constante y ha llevado a la empresa a buscar una reestructuración que sea aprobada por sus acreedores, en un intento por recuperar la estabilidad financiera que ha perdido.
A lo largo de los últimos años, Movistar ha enfrentado un deterioro notable en su desempeño en el mercado de telecomunicaciones. Según el Organismo Supervisor de Inversión Privada en Telecomunicaciones (Osiptel), al cierre de 2024, la compañía ha experimentado la pérdida de clientes por tercer año consecutivo, lo que ha generado un efecto dominó en su cuota de mercado. A pesar de que el mercado móvil en Perú ha crecido, Movistar ha sido incapaz de aprovechar esta expansión.
De acuerdo con los datos proporcionados por Osiptel, Claro, Entel y Bitel han visto un aumento en su número de líneas móviles. Claro lidera el mercado con 12,83 millones de líneas, lo que representa aproximadamente el 30,05 % de la cuota de mercado, seguido de Movistar con 11,35 millones de líneas (26,57 %), Entel con 9,66 millones (22,61 %) y Bitel con 8,75 millones (20,49 %). Este informe muestra una clara tendencia de crecimiento para los competidores de Movistar, mientras que la empresa ha perdido 225,196 líneas en 2024, lo que se traduce en una caída del 1,95 % en su participación.
A pesar de la expansión general del mercado móvil en Perú, que alcanzó 42,70 millones de líneas al final de 2024 —marcando un crecimiento del 3,28 % con respecto a 2023—, la situación de Movistar contrasta fuertemente con este panorama positivo. Osiptel ha indicado que la modalidad de contrato (pospago y control) ha ganado participación y ahora representa el 44,70 % del total de líneas móviles, mientras que el segmento prepago se mantiene en un 55,30 %.
La situación de Telefónica del Perú no solo se limita a la pérdida de clientes en su filial local, sino que también ha tomado decisiones estratégicas en el exterior. Recientemente, la empresa anunció la venta de su filial en Uruguay, en medio de este proceso de reestructuración en Perú, lo que pone de manifiesto la difícil posición que enfrenta en el sector de telecomunicaciones.
Aunque algunos jugadores más pequeños en el mercado, como Dolphin Mobile y Flash Servicios, siguen operando, su impacto en el sector es mínimo, representando en conjunto apenas el 0,28 % del mercado. Sin embargo, la caída de Flash Perú, que pasó de 131,010 líneas en 2023 a solo 40,875 en 2024, ilustra la volatilidad del sector y los desafíos que enfrentan las empresas más pequeñas.
La situación actual de Telefónica del Perú y su marca Movistar es un claro reflejo de los cambios en el mercado de telecomunicaciones en el país, donde la competencia se intensifica, y la capacidad de adaptación y crecimiento se ha vuelto crítica para la supervivencia de las empresas involucradas. La combinación de la solicitud de un Procedimiento Concursal Ordinario y la pérdida continua de clientes plantea un futuro incierto para la empresa, que deberá encontrar soluciones efectivas para revertir esta tendencia y recuperar su posición en el mercado.
Fuente: Infobae