Además, al comparar los datos de septiembre con los del mes anterior, agosto, la liquidez total del sector privado mostró una leve pero positiva expansión del 0,6%. Esto sugiere que la economía presentaba signos de estabilidad y crecimiento en su capacidad de financiamiento en la segunda parte del año.
En cuanto a los componentes específicos de los depósitos, el BCRP resaltó que los depósitos a la vista, que son aquellos que los clientes pueden retirar en cualquier momento sin previo aviso, aumentaron considerablemente en un 20,8%. Asimismo, los depósitos de ahorro, que permiten a los titulares acumular intereses de forma más eficiente, experimentaron un crecimiento del 13,8%. Por otro lado, los depósitos a plazo, que corresponden a aquellos que se mantienen por un tiempo determinado, también mostraron un crecimiento más moderado del 4,7%.
Sin embargo, no todos los indicadores fueron positivos. Los depósitos de Compensación por Tiempo de Servicios (CTS), que son reservas que los empleadores deben destinar a favor de sus trabajadores, sufrieron una caída significativa del 7%. Esta disminución podría ser un indicador de preocupaciones en el ámbito laboral o cambios en la dinámica de los empleos en el contexto económico actual.
Vea también: Ligo se integra al sistema de pagos del BCRP: ¿Qué implica?
La evolución de estos datos es esencial para entender la situación económica del país y permite observar tendencias que pueden afectar tanto la política monetaria como el bienestar financiero de los ciudadanos. La gestión de la liquidez y la evolución de los depósitos son factores clave a tener en cuenta por los analistas y los responsables de la formulación de políticas económicas en el Perú.
Fuente: Forbes