El desarrollo del nuevo aeropuerto internacional Jorge Chávez en Perú ha alcanzado un avance realmente destacado, con un 99,99% de progreso según el reciente informe del Organismo Supervisor de la Inversión en Infraestructura de Transporte de Uso Público (Ositrán). Este organismo, en coordinación con el concesionario Lima Airport Partners (LAP), realizó una evaluación exhaustiva durante los días 12, 13 y 14 de abril de 2025 para determinar el estado actual de las obras y verificar el cumplimiento de los estándares establecidos en el proyecto.
El informe revela que la mayor parte de las tareas de construcción y puesta en marcha del nuevo terminal están finalizadas, incluyendo áreas clave del aeropuerto, sistemas de seguridad y servicios públicos. Sin embargo, a pesar de este avance casi total, aún existen pequeñas tareas pendientes que representan solo un 0,01% del proyecto total, las cuales están en proceso de finalización o ajustes menores.
Una de las áreas que ha sido objeto de revisión es el Sistema de Detección y Alarma Contra Incendios (DACI). Aunque la infraestructura principal está en funcionamiento, todavía quedan por realizar algunos ajustes menores en componentes específicos, como las luces estroboscópicas y la megafonía. Es importante destacar que estos pequeños detalles no comprometen la operatividad ni la seguridad del aeropuerto, sino que corresponden a trabajos de perfeccionamiento final para garantizar un funcionamiento óptimo y conforme a las normativas de seguridad.
En cuanto a la parte arquitectónica, las tareas pendientes incluyen la culminación de reparaciones menores relacionadas con las losetas del piso, el retiro de ciertos cerramientos de drywall y la remoción de materiales protectores en los zócalos. Además, se están realizando trabajos de limpieza en diversas áreas del terminal, un paso fundamental para garantizar una presentación impecable y un ambiente cómodo para los pasajeros y el personal operativo. También se han identificado algunas zonas específicas donde se requiere jardinería y mantenimiento del entorno exterior, aunque estos aspectos no afectan la funcionalidad del aeropuerto, sino que responden a requerimientos estéticos y de mantenimiento general.
El avance del 99,99% evidencia que la infraestructura está prácticamente lista para su operación plena y que solo restan detalles menores que serán corregidos en el corto plazo. Esto marca un hito importante para Perú, ya que el nuevo aeropuerto Jorge Chávez no solo ampliará la capacidad y mejorará la experiencia de los viajeros, sino que también fortalecerá la infraestructura del país en términos de conectividad internacional y desarrollo económico.
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El concesionario LAP ha mostrado su compromiso en cumplir con los plazos y estándares establecidos, y las autoridades peruanas confían en que, en los próximos meses, se podrán culminar los trabajos pendientes para dar inicio formal a las operaciones del nuevo aeropuerto. La finalización de estos pequeños detalles permitirá que el aeropuerto funcione en su máxima capacidad y brinde servicios de primer nivel a millones de pasajeros que transitan por Lima cada año.
En conclusión, el progreso del nuevo aeropuerto Jorge Chávez es un ejemplo de eficiencia y planificación en infraestructura pública en Perú. La evaluación positiva del organismo regulador refleja que la obra está en su etapa final, con solo unos detalles que ajustar y perfeccionar. La inauguración oficial, prevista para los próximos meses, marcará un nuevo capítulo en la historia de la aviación peruana y posicionará al país como un importante hub en la región sudamericana.
Fuente: DFSud
