En los últimos años, el etiquetado frontal se ha convertido en una herramienta fundamental en la regulación alimentaria de diversos países. En México, su implementación en 2020 marcó un hito en la lucha contra la obesidad y las enfermedades crónicas no transmisibles. Este sistema de advertencias en los empaques de alimentos ha transformado la forma en que los consumidores toman decisiones de compra, modificando patrones de consumo y obligando a la industria alimentaria a reformular sus productos.
El etiquetado frontal de advertencia en México se implementó como una medida para combatir la creciente tasa de enfermedades relacionadas con la alimentación, como la obesidad y la diabetes. Este sistema de etiquetado, basado en el modelo de la Organización Panamericana de la Salud (OPS), señala el exceso de calorías, azúcares, grasas saturadas, grasas trans y sodio en los productos.
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Objetivos del etiquetado frontal
Entre los objetivos de esta normativa se encuentran:
- Reducir el consumo de productos con alto contenido de nutrientes críticos.
- Incentivar la reformulación de productos por parte de la industria.
- Fomentar decisiones de compra más informadas.
Según la Encuesta Nacional de Salud y Nutrición (ENSANUT), más del 70% de la población mexicana lee los sellos antes de comprar un producto, lo que demuestra el impacto de esta regulación en la conducta del consumidor.
Impacto del etiquetado frontal en las decisiones de compra
Diversos estudios han demostrado que los sellos negros generan una percepción negativa en los consumidores, quienes han reducido la compra de productos con múltiples advertencias. Un estudio de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM) reportó que el 45% de los consumidores evita comprar productos con más de dos sellos.
Además, las tendencias de consumo han favorecido a los productos con menos sellos o sin advertencias. La consultora Nielsen IQ reportó que la demanda de productos bajos en sodio, sin azúcar añadida y sin grasas trans creció un 12% en 2023.
Afectación a las estrategias de marketing y reformulación de productos
Las empresas han adaptado su comunicación para enfatizar ingredientes naturales, beneficios funcionales y reformulación de productos. Según datos de la Cámara Nacional de la Industria de Transformación (CANACINTRA), el 60% de las marcas ha modificado sus formulaciones para reducir los sellos en sus etiquetas.
Tendencias del consumo post-implementación del etiquetado frontal
Auge de productos reformulados y clean label: El concepto «clean label» ha cobrado fuerza, con un aumento del 20% en la demanda de productos con ingredientes naturales y etiquetas comprensibles, según Euromonitor International.
Crecimiento del mercado de snacks saludables: Los consumidores buscan opciones más saludables, lo que ha impulsado la oferta de snacks sin azúcar añadida, con ingredientes naturales y fortificados con proteínas o fibra.
Mayor interés en alimentos funcionales: El mercado de alimentos funcionales ha crecido un 15% anual, impulsado por el etiquetado frontal, ya que los consumidores buscan productos con beneficios específicos como inmunidad, digestión y salud cardiovascular.
Evolución del empaque y etiquetado: Las marcas han innovado en el diseño de empaques para comunicar transparencia y valores nutricionales, resaltando ingredientes y certificaciones.
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El etiquetado frontal ha cambiado las reglas del juego en la industria alimentaria en México. Su impacto en la decisión de compra es innegable, y las empresas han respondido con reformulación de productos y estrategias de marketing más alineadas con el perfil del consumidor actual.
En un mercado que evoluciona hacia la salud y el bienestar, la clave para la industria será la innovación y la adaptación a las nuevas exigencias de los consumidores. A cuatro años de la implementación del etiquetado frontal en Méxi