El sector de supermercados y distribución en España se caracteriza por su gran diversidad y competencia, sobre todo en las zonas costeras y rurales. La lucha por la dominancia territorial en este mercado refleja una dinámicas de poder que, pese a la presencia de grandes corporaciones como Mercadona, también muestra el auge de cadenas regionales y de proximidad que afectan el escenario global de distribución.
La supremacía de Mercadona y el papel de Día en el mercado
Mercadona, la compañía liderada por Juan Roig, continúa siendo la referencia principal en volumen de ventas en el país. Con una presencia en la mayor parte del territorio y alrededor de 1.600 tiendas distribuidas por toda España, Mercadona ha logrado consolidar su liderazgo en el mercado. Sin embargo, a nivel territorial, su influencia en el mapa no es tan extensa como algunos podrían imaginar, ya que su implantación está más concentrada en ciertas regiones, siendo especialmente fuerte en la provincia de Ciudad Real y otras áreas del centro y Levante.
Por otra parte, está Grupo Día, que a diferencia de Mercadona, destaca por su enorme red de tiendas de proximidad. Aunque apenas representa un 3,6% de las ventas totales del mercado, Día dispone de aproximadamente 2.300 establecimientos — el grupo más numeroso en cantidad — distribuidos principalmente en áreas rurales y pequeños municipios. Su estrategia de cercanía y presencia en zonas menos urbanizadas ha hecho que sea la cadena de referencia para la mitad del país, a pesar de haber atravesado un proceso de reestructuración y saneamiento desde 2018, que incluyó la pérdida de aproximadamente un tercio de su red de tiendas y fue adquirido por el fondo de inversión luxemburgués LetterOne.
Análisis territorial: un mapa que revela la competencia local y regional
Un reciente estudio basado en el análisis de más de 6,000 ubicaciones de cadenas de supermercados en España, realizado por El Orden Mundial, ha logrado mapear con precisión el alcance territorial de las principales cadenas de distribución. La investigación muestra cómo el territorio se reparte entre los diferentes actores y cómo estos ajustan sus estrategias para ganar presencia en diferentes zonas del país.
El resultado es un mapa muy complejo, donde la influencia de cada cadena varía notablemente según la región. En la denominada España vaciada — áreas rurales y menos densamente pobladas — Día continúa siendo la opción más firme en muchas zonas, debido a su modelo de cercanía. Desde su adquisición por LetterOne, día ha anunciado su ambición de abrir otras 300 tiendas de proximidad de aquí a 2029 para recuperar cuota de mercado y consolidar su presencia en estos territorios desfavorecidos por las grandes cadenas tradicionales.
Mientras tanto, en los núcleos urbanos más grandes, cadenas como Carrefour y Lidl concentran esfuerzos para captar clientes en las grandes ciudades y áreas metropolitanas. Sin embargo, su cuota de influencia en el mapa es menor en zonas rurales o en pequeñas localidades, donde su presencia es limitada.
La competencia entre cadenas: diferenciación territorial y estratégica
Un aspecto interesante que refleja el mapa del retail español es la manera en que las distintas cadenas buscan posicionarse en diferentes perfiles de mercados. Por ejemplo, Covirán, que se originó en Granada y forma parte de la Cooperativa Virgen de las Angustias, se ha consolidado como una de las marcas con mayor cobertura en municipios pequeños y medianos. Con presencia en 322 localidades con menos de 2.000 habitantes, Covirán se ha convertido en la opción preferida en muchas zonas de la mitad oriental de Andalucía y en Cantabria. Su estrategia se basa en mantener una superficie media de tienda reducida, lo que permite mayor flexibilidad y menor inversión, además de la cercanía que tanto valoran los consumidores en estos territorios alejados de los grandes centros urbanos.
Por otro lado, cadenas como Carrefour y Lidl mantienen su fuerza en los grandes núcleos urbanos, focalizando su presencia en las áreas con mayor densidad poblacional y alto poder adquisitivo, donde sus formatos de grandes superficies y supermercados de descuento resultan más rentables.
Datos y tendencias del mercado de supermercados en España
Según datos recientes de Kantar a finales de 2024, las cinco principales cadenas en ventas en España apenas monopolizan la mitad del mercado total, marcando un contraste importante con otros países europeos. En Italia, por ejemplo, las cinco mayores cadenas concentran un 56% del mercado, en Portugal un 70%, en Alemania un 73%, en Reino Unido un 75% y en Francia alcanzan un 85%.
Este alto grado de fragmentación en España se explica por dos grandes razones. La primera, la preferencia marcada de los consumidores españoles por los alimentos frescos, que no siempre se encuentran en las grandes cadenas, sino en tiendas tradicionales como fruterías, carnicerías o pescaderías, que aún representan aproximadamente un 15% del consumo total. La segunda razón, la proliferación de cadenas de carácter regional que destacan en diferentes zonas del país, adaptándose a las preferencias locales y ofreciendo un nivel de cercanía difícil de igualar para las grandes cadenas.
La influencia de la tradición y la cercanía en el mercado español
El mercado de distribución en España no solo se rige por grandes cifras y cadenas multinacionales, sino que también está profundamente arraigado en el carácter regional y en las tradiciones de compra locales. La preferencia por alimentos frescos, además de la presencia de tiendas tradicionales, mantiene un equilibrio que las grandes cadenas aún no logran desplazar por completo. Esta situación otorga a cadenas regionales y de proximidad un papel crucial en la configuración del mapa comercial del país.
El liderazgo de Mercadona, en términos de ventas y rentabilidad, no se traduce en una influencia territorial tan fuerte en comparación con Día o Covirán. La dispersión en la distribución de tiendas y la preferencia por el comercio local en pequeñas comunidades hacen que el panorama sea muy diverso, con numerosos actores adaptándose a las peculiaridades de cada zona.
Un mercado en constante cambio y con gran diversidad territorial
El mercado de supermercados en España es un escenario dinámico y altamente fragmentado, donde la competencia no solo se mide por volumen de ventas, sino también por la presencia territorial y la cercanía al cliente. Las cadenas tradicionales, regionales y grandes multinacionales continúan adaptándose a las demandas del consumidor y a las particularidades de cada región.
Mercadona mantiene su liderazgo en ventas, pero no en presencia, mientras que Día y Covirán consolidan su fortaleza en zonas rurales y pequeñas localidades. La tendencia hacia la proximidad y la adaptación a las necesidades locales se mantiene como una estrategia clave para las cadenas que desean crecer y mantenerse relevantes en un mercado cada vez más competitivo. La lucha territorial en el sector de supermercados en España refleja no solo la diversidad geográfica del país, sino también un modelo de distribución que combina tradición, innovación y una fuerte orientación a la satisfacción del cliente en cada rincón del territorio español.
Perspectivas futuras en el sector de supermercados en España
A medida que evoluciona el mercado, la competencia por el territorio sigue siendo uno de los aspectos más relevantes para comprender las dinámicas en el sector de la distribución en España. La apuesta por la cercanía, el desarrollo de tiendas de tamaño reducido en zonas rurales, y el fortalecimiento de las cadenas regionales parecen ser tendencias que seguirán definiendo el mapa de supermercados en los próximos años.
Por ejemplo, la estrategia de Día, ahora en manos de fondos de inversión, de abrir 300 nuevas tiendas en los próximos años muestra un enfoque en consolidar su red de proximidad. Mientras tanto, cadenas como Covirán o supermercados tradicionales están aprovechando su conocimiento del terreno para seguir siendo la opción preferida en sus zonas de influencia.
Por otro lado, las grandes cadenas de capital internacional, como Carrefour o Lidl, continúan invirtiendo en las grandes ciudades, donde su formato resulta más eficiente y rentable. Es probable que, en el futuro, veamos una mayor especialización y diferenciación en función de las regiones, adaptando la oferta a las preferencias y necesidades específicas de cada zona.
Impacto en los consumidores y en la economía local
La diversidad territorial del sector de supermercados en España tiene también un impacto positivo en los consumidores y en la economía local. La presencia de cadenas regionales y de proximidad garantiza una mayor variedad de productos, fomenta la competencia y ayuda a mantener vivas las tradiciones comerciales en pequeños municipios. Además, genera oportunidades de empleo y de desarrollo económico en regiones que, de otra forma, podrían quedar rezagadas ante la concentración en zonas urbanas.
La tendencia hacia la cercanía y la adaptabilidad también ayuda a reforzar el tejido social en áreas rurales, donde las tiendas de proximidad representan mucho más que un punto de compra: son un espacio de encuentro y apoyo comunitario.
El mapa de supermercados en España revela un mercado en plena transformación, caracterizado por una fuerte competencia territorial y por una diversidad de actores que buscan consolidar su presencia en función de las características de cada región. Mientras gigantes como Mercadona siguen dominando en volumen de ventas, cadenas como Día y Covirán consolidan su liderazgo en la proximidad y en zonas rurales. La estrategia de adaptación a las particularidades territoriales, junto con la innovación en formatos y servicios, marcará el futuro del sector.
Ver también: Mercadona revoluciona con tres novedades carnívoras que debes probar
Este escenario refleja no solo la importancia de entender cómo se distribuyen las tiendas, sino también la necesidad de valorar las tradiciones y preferencias locales en un mercado que busca equilibrar modernidad y cercanía, garantizando así la sostenibilidad y competitividad de todos los actores en los próximos años.