Marcas blancas, el nuevo imperio del ahorro que redefine el consumo de alimentos y bebidas en Colombia, en los últimos años, el panorama del consumo en Colombia ha experimentado un cambio significativo, impulsado por el auge de las marcas blancas o propias, que están ganando cada vez más protagonismo en los hogares colombianos. Según datos de la consultora NielsenIQ, las marcas propias han logrado captar el 25% del mercado de comestibles en la última década. Pero ¿qué impulsa esta preferencia? La respuesta se encuentra en su atractivo principal: el precio. En un contexto económico marcado por la inflación y la necesidad de optimizar el presupuesto familiar, los consumidores colombianos están optando por estas alternativas más asequibles, aunque en ocasiones signifique sacrificar ciertos aspectos de calidad.
Las marcas blancas son productos que se comercializan bajo la etiqueta de un distribuidor o minorista, como supermercados o tiendas de descuento duro (hard discount). Estas tiendas suelen fabricar los productos ellas mismas o a través de terceros, manteniendo los costos significativamente bajos en comparación con las marcas tradicionales. La expansión de las tiendas hard discount en Colombia ha sido un factor crucial para el crecimiento de este segmento de mercado, ofreciendo productos de calidad aceptable a precios mucho más competitivos.
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El Crecimiento Acelerado de las Marcas Blancas en el Retail Colombiano
Según la consultora EY-Parthenon Colombia, el 42% de las ventas en el retail colombiano actual provienen de marcas blancas, y se espera que este número siga en aumento debido a la transformación que está experimentando la industria. Esta tendencia ha permitido que grandes cadenas minoristas vean en las marcas propias una oportunidad de crecimiento y fidelización de los consumidores, especialmente en tiempos de incertidumbre económica.
El presidente de las tiendas D1, Cristian Babler Font, comenta que el éxito de su modelo de negocio radica en la estrategia de ofrecer productos de alta calidad a precios bajos, un objetivo que logran mediante el enfoque en marcas propias. En la actualidad, D1 maneja más de 90 marcas blancas, 30 de las cuales pertenecen a la categoría de alimentos y bebidas. Entre las marcas más representativas están Latti, que produce quesos y productos lácteos, Zev, especializada en salsas y aderezos, y Kedeli, conocida por sus refrescos y gelatinas. Este catálogo abarca una amplia gama de productos que atienden las necesidades diarias de los consumidores colombianos.
Por su parte, la cadena Ara, otro gigante del segmento de hard discount, también ha adoptado con fuerza las marcas blancas. Más del 90% de sus productos son fabricados por proveedores locales, lo que no solo fortalece su portafolio, sino que también apoya a la industria nacional. Cada año, Ara invierte más de 7 billones de pesos en el desarrollo de marcas propias, destacando categorías como alimentos congelados, panadería, carnes frías, snacks y lácteos. Algunas de sus marcas más reconocidas incluyen Monumental, A la Mesa, Arrivare y De la Cuesta.
Grupo Éxito: Un Referente en el Mercado de Marcas Blancas
El Grupo Éxito, uno de los líderes del retail en Colombia con marcas como Éxito, Carulla, Surtimax y SuperInter, también ha ampliado considerablemente su oferta de marcas propias. Según Luz María Ferrer, gerente de Producto Gran Consumo del Grupo Éxito, las marcas blancas no solo han ayudado a mantener precios competitivos, sino que también han permitido afrontar los retos inflacionarios. Estas marcas generan el 38% de las ventas del grupo, y se espera que esa cifra alcance el 40% al finalizar el año. Entre sus marcas más populares se encuentran Éxito, Carulla, Frescampo, Ekono, y Taeq, las cuales ofrecen una variedad de productos que permiten a los consumidores ahorrar sin sacrificar demasiado en calidad.
Este enfoque de Grupo Éxito en las marcas blancas refleja un movimiento generalizado en el retail colombiano: la necesidad de adaptarse a las demandas del consumidor moderno, quien busca la mejor relación entre precio y calidad.
Un Oportunidad para las Pymes de Alimentos y Bebidas
El auge de las marcas blancas no solo beneficia a las grandes cadenas minoristas, sino también a las pequeñas y medianas empresas (Pymes) que participan en su producción. Camilo Herrera, presidente de la consultora de marketing y consumo Raddar, destaca que este crecimiento abrirá la puerta a que muchas Pymes se conviertan en actores principales del mercado alimentario en Colombia, superando incluso a marcas tradicionales que anteriormente dominaban el sector.
Herrera señala que las empresas que deseen aprovechar esta oportunidad deben enfocarse en cuatro pilares: innovación, flexibilidad, calidad y precios competitivos. El mercado de marcas blancas en América Latina está en pleno auge, y se espera que crezca un 20% en los próximos tres años. De acuerdo con la consultora Kantar, el dominio de las marcas propias en el mercado de alimentos y bebidas en la región pasará del 50% actual al 70% para 2026.
Este fenómeno está redefiniendo el ecosistema empresarial colombiano y presenta desafíos para las marcas tradicionales, que deberán adaptarse a la creciente competencia o perder terreno ante las marcas blancas.
Impacto en los Tenderos Tradicionales
El crecimiento de las tiendas hard discount y el auge de las marcas blancas también están generando preocupación entre los tenderos tradicionales en Colombia. Según Jaime Alberto Cabal, presidente de la Federación Nacional de Comerciantes (Fenalco), muchos tenderos ven en las marcas propias una amenaza considerable, pues resulta difícil competir con sus precios bajos. Un estudio reciente de Fenalco revela que cinco de cada diez consumidores colombianos prefieren comprar marcas blancas, lo que representa un desafío importante para los tenderos, quienes deberán centrarse en ofrecer un servicio de calidad y una experiencia de compra diferenciada para mantenerse relevantes en el mercado.
María Rivera, coordinadora de proyectos de Fenaltiendas, sugiere que, aunque los tenderos no pueden competir en precios, pueden diferenciarse ofreciendo productos frescos, servicios personalizados y una atención cercana al cliente, características que suelen ser difíciles de replicar en las grandes cadenas de retail.
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El Futuro de las Marcas Blancas en Colombia
El auge de las marcas blancas en Colombia está transformando el consumo de alimentos y bebidas de manera irreversible. Los consumidores, impulsados por la necesidad de optimizar su presupuesto, están optando cada vez más por estas marcas, que ofrecen productos de buena calidad a precios mucho más accesibles. Este cambio está obligando a las marcas tradicionales a reevaluar sus estrategias y a las pequeñas empresas a innovar para competir en un mercado cada vez más dinámico.
El futuro del retail colombiano parece estar ligado al crecimiento de las marcas blancas, que no solo están redefiniendo la dinámica de consumo, sino también el ecosistema empresarial del país. A medida que más empresas se sumen a esta tendencia, veremos una transformación en la manera en que los colombianos compran y consumen alimentos y bebidas, marcando un antes y un después en la industria del retail.