Innovación digital y automatización, claves para superar los desafíos globales en la logística, en un mundo cada vez más interconectado pero también más incierto, la logística global enfrenta desafíos sin precedentes. Disrupciones en las cadenas de suministro, tensiones geopolíticas, inflación y nuevas barreras comerciales están remodelando el escenario en el que operan las empresas. En este contexto, la digitalización se ha convertido en una herramienta vital para mantener la competitividad, adaptarse con rapidez y garantizar la continuidad operativa.
La transformación digital en el ámbito logístico no solo es una tendencia inevitable, sino una necesidad urgente para las organizaciones que desean mantenerse relevantes frente a un entorno cambiante. Incorporar nuevas tecnologías permite mejorar la visibilidad de las operaciones, optimizar recursos, reducir costos y tomar decisiones estratégicas con base en datos en tiempo real. En este artículo exploraremos cómo la digitalización y la automatización se están posicionando como soluciones integrales ante los desafíos de la logística moderna.
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Un entorno logístico global bajo presión
La logística mundial atraviesa un periodo marcado por una gran incertidumbre. La reciente reimposición de aranceles por parte de la administración de Donald Trump, incluyendo tarifas del 10% a varios países latinoamericanos, ha desestabilizado aún más las cadenas de suministro globales. Estas medidas proteccionistas han introducido nuevas barreras comerciales que obligan a las empresas a reconfigurar sus rutas de aprovisionamiento, buscar nuevos socios logísticos y replantear sus estrategias de distribución.
Estas acciones se suman a otras tensiones acumuladas en los últimos años, como los rezagos derivados de la pandemia, conflictos internacionales y la crisis de los contenedores, lo que ha generado cuellos de botella persistentes en puntos críticos del comercio internacional.
De acuerdo con el informe High freight rates strain global supply chains, threaten vulnerable economies de la UNCTAD (2024), durante la primera mitad de 2024 los costos del transporte marítimo alcanzaron niveles históricamente altos, impulsados por interrupciones imprevistas en rutas clave como el Canal de Suez y el Mar Rojo, y por el incremento de los precios del combustible. Esta situación ha afectado de forma particular a las economías más dependientes del comercio internacional, muchas de ellas ubicadas en América Latina, África y el sudeste asiático.
Digitalización como estrategia de supervivencia y crecimiento
Ante este panorama complejo, las empresas están recurriendo a la transformación digital para encontrar soluciones ágiles y sostenibles. El informe Data Modernization is NOW de Minsait (2022) señala que la adopción de herramientas digitales en la logística puede elevar la rentabilidad en más de un 10%, mediante la automatización de flujos críticos, la reducción de tiempos de gestión y una gestión más precisa del inventario.
Entre las tecnologías más disruptivas se encuentran:
Inteligencia Artificial (IA): permite una mejor planificación de la demanda, pronóstico de inventarios y optimización de rutas.
Aprendizaje automático (Machine Learning): facilita la automatización inteligente de procesos repetitivos, reduciendo errores y mejorando la eficiencia operativa.
Gemelos digitales (Digital Twins): simulan en tiempo real la operación de cadenas logísticas completas, permitiendo una planificación más precisa.
Internet de las Cosas (IoT): ofrece visibilidad en tiempo real mediante sensores y dispositivos conectados, lo que permite monitorear desde la ubicación de mercancías hasta el estado de los vehículos.
Análisis de datos en tiempo real (Real-time Analytics): transforma grandes volúmenes de datos en información útil para la toma de decisiones estratégicas.
Estas herramientas no solo agilizan las operaciones logísticas, sino que también aportan un valor adicional al apoyar la sostenibilidad, ya que optimizan el uso de recursos y disminuyen las emisiones de carbono.
El caso Schneider Electric: automatización y sostenibilidad
Un ejemplo concreto de esta transformación digital se puede observar en Schneider Electric. La compañía ha implementado un modelo logístico basado en la automatización y el monitoreo en tiempo real para responder a interrupciones en las cadenas de suministro sin comprometer la eficiencia de sus operaciones.
“Estos avances digitales no solo mejoran la eficiencia operativa, sino que también permiten que la logística sea sostenible”, afirma Ricardo Pacheco, gerente de Logística en la empresa. “La integración de herramientas como el análisis de datos en tiempo real y la automatización de almacenes está redefiniendo la forma en que operan las cadenas de suministro en el mundo, y Chile no es la excepción”.
Una de las soluciones más destacadas utilizadas por Schneider Electric es EcoStruxure Plant Advisor, un sistema de monitoreo centralizado que permite gestionar y analizar datos de múltiples plantas y sistemas en un solo lugar. Esta plataforma permite realizar mantenimiento predictivo, ajustar operaciones según la demanda, y escalar rápidamente la producción en función de cambios inesperados en el mercado.
Decisiones en tiempo real: la nueva norma
La toma de decisiones basada en datos en tiempo real se está convirtiendo en un estándar competitivo en el sector logístico. Según un estudio reciente de Naitive Cloud (2025), las empresas que han adoptado sistemas de monitoreo y control en tiempo real han mejorado su capacidad de respuesta en un 63%, y han reducido los errores operativos en un 40%. Esta agilidad se traduce en un retorno sobre la inversión (ROI) de hasta el 300%, gracias a una mejor asignación de recursos y reducción de ineficiencias.
Estas cifras confirman que la digitalización no es únicamente una respuesta reactiva a la crisis, sino una herramienta de planificación estratégica que permite anticipar escenarios, reducir riesgos y fortalecer la resiliencia empresarial.
Ventajas competitivas a largo plazo
Además de los beneficios inmediatos, la digitalización ofrece ventajas estructurales para las organizaciones. Una operación logística modernizada puede:
Adaptarse rápidamente a nuevas condiciones del mercado o interrupciones globales.
Reducir costos logísticos mediante automatización y planificación avanzada.
Mejorar la experiencia del cliente, garantizando entregas más rápidas y precisas.
Contribuir a la sostenibilidad, disminuyendo el impacto ambiental de las operaciones.
Escalar operaciones globales, integrando mercados con mayor agilidad.
Estas capacidades no solo permiten sobrevivir en un entorno volátil, sino también capitalizar oportunidades que antes eran difíciles de alcanzar.
El desafío de la implementación
A pesar de las ventajas, el camino hacia la digitalización no está exento de desafíos. Muchas empresas, especialmente las pequeñas y medianas, enfrentan barreras como:
Altos costos iniciales de inversión
Falta de talento especializado en tecnologías digitales
Resistencia al cambio en los equipos operativos
Infraestructura tecnológica limitada
Superar estos obstáculos requiere un enfoque escalonado. Es recomendable comenzar con proyectos piloto de automatización, implementar soluciones modulares y aprovechar alianzas estratégicas con proveedores de tecnología que ofrezcan servicios personalizados y escalables.
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Un cambio estructural en marcha
La digitalización de la logística ya no es una opción, sino una prioridad estratégica. En un entorno cada vez más complejo, las organizaciones que adopten tecnologías avanzadas serán las que logren mantenerse competitivas, sostenibles y resilientes frente a los desafíos del futuro.
El cambio estructural que representa la transformación digital va más allá de la adopción de herramientas: implica una nueva forma de pensar la logística, en la que los datos, la automatización y la agilidad son los ejes centrales del éxito. En este sentido, las empresas que inviertan hoy en innovación logística estarán mejor preparadas para enfrentar cualquier disrupción futura, y podrán consolidar su posición como líderes en un mercado global cada vez más exigente.
