Cinco dinámicas clave para exportadores colombianos en un mundo en transformación, el escenario del comercio internacional ha experimentado una metamorfosis acelerada en los últimos años, impulsada por fuerzas disruptivas como la digitalización omnipresente, la creciente complejidad de los conflictos geopolíticos y la demanda cada vez más apremiante de productos que cumplan con criterios de sostenibilidad ambiental y social. En este contexto de cambio constante, las empresas colombianas que aspiran a expandir sus horizontes más allá de las fronteras nacionales deben navegar con astucia y visión estratégica, comprendiendo las dinámicas fundamentales que rigen el intercambio global para evitar los escollos y capitalizar las oportunidades emergentes.
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Según datos reveladores del Banco Mundial, el volumen del comercio global de bienes y servicios superó la asombrosa cifra de 32 billones de dólares en el año 2024, consolidando a América Latina como una región de importancia estratégica para el crecimiento de las exportaciones a nivel mundial. En este contexto regional, Colombia registró exportaciones por un valor de 49.551 millones de dólares en 2023, lo que representó una ligera contracción del 0,4% en comparación con el año anterior, atribuida principalmente a la disminución en las ventas de bienes minero-energéticos.
Este panorama comercial, caracterizado por su dinamismo inherente y su susceptibilidad a los cambios geopolíticos y tecnológicos, exige un análisis profundo y la implementación de estrategias bien definidas para aquellas empresas colombianas que buscan aventurarse en los mercados internacionales. Edna Catalina Osorio Alzate, docente del programa de Negocios Internacionales de Areandina, seccional Pereira, subraya la importancia de comprender factores clave como la transformación digital acelerada, la intrincada red de normativas comerciales y la creciente exigencia de sostenibilidad por parte de los consumidores globales, elementos que están redefiniendo las reglas del juego para las compañías con una visión de expansión internacional.
A continuación, se presentan cinco dinámicas cruciales del comercio internacional que las empresas colombianas deben considerar cuidadosamente al embarcarse en la aventura de la exportación:
La Irreversible Ola de la Digitalización y el Comercio Electrónico Transfronterizo: La transformación digital ha derribado las barreras tradicionales de entrada a los mercados internacionales, permitiendo a las organizaciones colombianas acceder a consumidores en todo el mundo sin la necesidad de establecer una presencia física costosa. Las plataformas de comercio electrónico y las sofisticadas herramientas de marketing digital facilitan la exportación de productos y servicios, democratizando el acceso a un mercado global cada vez más interconectado. “En la región de América Latina y el Caribe, las diez economías más grandes concentran más del 90% del tráfico transfronterizo dirigido a plataformas locales de e-commerce, lo que subraya la relevancia estratégica del comercio electrónico como un motor de crecimiento para las exportaciones en el continente”, explica la experta Edna Catalina Osorio Alzate.
El Laberinto de las Normativas y los Acuerdos Comerciales Estratégicos: El acceso preferencial a los mercados internacionales a través de la negociación y el aprovechamiento de los Tratados de Libre Comercio (TLC), así como la adhesión a las regulaciones comerciales internacionales, se han convertido en pilares fundamentales para agilizar los complejos procesos logísticos y beneficiarse de las reducciones arancelarias que estos acuerdos ofrecen. “Un conocimiento profundo de estas normativas permite a los exportadores colombianos ingresar a mercados exigentes con mayores facilidades y ventajas competitivas. Actualmente, Colombia cuenta con una red de 17 TLC vigentes, que otorgan acceso preferencial a más de 60 mercados internacionales, abriendo un abanico de oportunidades comerciales significativas”, añade la docente de Areandina.
La Imperativa de la Sostenibilidad y el Consumo Responsable a Nivel Global: Los consumidores en los mercados internacionales, especialmente en las economías desarrolladas, demandan cada vez más productos que cuenten con certificaciones ambientales creíbles y que cumplan con los principios del comercio justo. Las empresas colombianas que adopten prácticas empresariales sostenibles en toda su cadena de valor estarán mejor posicionadas para capitalizar las oportunidades que ofrecen estos mercados, donde la responsabilidad ambiental influye de manera significativa en las decisiones de compra de los consumidores. Según datos de la Conferencia de las Naciones Unidas sobre Comercio y Desarrollo (UNCTAD), un impresionante 80% de los consumidores en Europa prefieren activamente productos que se consideran ecológicos, lo que refuerza la necesidad de que los exportadores colombianos adapten sus estrategias de producción y comercialización para alinearse con esta creciente tendencia global.
La Volatilidad de las Tensiones Geopolíticas y el Resurgimiento del Proteccionismo: La compleja y cambiante dinámica de las tensiones geopolíticas, ejemplificada por la prolongada guerra comercial entre las dos mayores economías del mundo, Estados Unidos y China, ha generado un impacto significativo en las intrincadas cadenas de suministro globales, introduciendo incertidumbre y provocando cambios abruptos en los patrones de demanda a nivel mundial. “Esta situación global obliga a los exportadores colombianos a diversificar sus mercados de destino y a desarrollar una capacidad de adaptación ágil para responder a los nuevos escenarios comerciales que emergen constantemente. De acuerdo con análisis del Fondo Monetario Internacional (FMI), los aranceles impuestos en el marco de la disputa comercial entre Estados Unidos y China han afectado a un alarmante 65% de su comercio bilateral, lo que ha provocado la relocalización de inversiones en países estratégicos de América Latina como México, Brasil y, potencialmente, Colombia”, señala la experta Edna Catalina Osorio Alzate.
Los Desafíos y las Oportunidades en la Logística y los Costos de Transporte Internacional: El incremento sostenido de los costos logísticos a nivel global, exacerbado por las disrupciones en las cadenas de suministro internacionales, ha convertido la planificación estratégica en las áreas de almacenamiento, distribución y optimización de rutas de transporte en un factor crítico para minimizar los riesgos operativos y los costos asociados a las exportaciones. La Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico (OCDE) reportó un aumento promedio del 30% en los costos del transporte marítimo durante el año 2024, lo que obliga a las empresas exportadoras colombianas a buscar activamente estrategias innovadoras para lograr una mayor eficiencia en sus operaciones de distribución internacional.
Oportunidades Estratégicas para Colombia en el Nuevo Orden Comercial Global:
El contexto global en constante evolución, marcado por los desafíos y las dinámicas previamente mencionadas, también genera nuevas y prometedoras oportunidades para el país. Una de las tendencias más relevantes en este sentido es el fenómeno del nearshoring, donde empresas, particularmente las de origen estadounidense, buscan activamente proveedores en países de América Latina para reducir los costos logísticos asociados a las cadenas de suministro globales y mitigar los riesgos derivados de las barreras comerciales con Asia.
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Según la docente de Areandina, sectores estratégicos de la economía colombiana como el agroindustria, la manufactura con valor agregado y la industria de la tecnología tienen un potencial significativo de crecimiento en los mercados internacionales. Algunos de los productos clave que pueden liderar esta expansión son:
Aguacate Hass: En el año 2024, Colombia alcanzó cifras récord en la exportación de aguacate Hass, con un volumen total de 138.316 toneladas vendidas en los mercados internacionales, lo que representó un impresionante incremento del 20,8% en comparación con el año 2023. Europa se consolidó como el principal destino de estas exportaciones, absorbiendo 101.180 toneladas (el 73,2% del total), seguido por Estados Unidos, con 30.207 toneladas (el 21,8%), lo que significó un crecimiento aún más notable del 133,7% con respecto al año anterior.
Café Especial: Colombia se mantiene como el tercer mayor exportador mundial de café, con ventas anuales que superan los 3.500 millones de dólares. En febrero de 2025, la producción de café experimentó un aumento significativo del 42%, alcanzando los 1,36 millones de sacos de 60 kilos, impulsada por condiciones climáticas favorables en las principales regiones productoras.
Cacao y Productos Derivados: La demanda de cacao fino y sostenible, reconocido por su alta calidad y sus atributos únicos, ha experimentado un crecimiento constante en mercados de alto valor como Suiza y Bélgica, que actualmente absorben el 60% de las exportaciones de cacao colombiano.
Software y Servicios Digitales: La industria tecnológica colombiana se está consolidando como un actor relevante en el ámbito de la tercerización de servicios empresariales (BPO). Según datos del Ministerio de Tecnologías de la Información y las Comunicaciones (MinTIC), las exportaciones en este dinámico sector registraron un crecimiento del 20% en el último año.
Frutas Exóticas: Productos agrícolas no tradicionales como la guanábana y el maracuyá están ganando popularidad y reconocimiento en diversos mercados internacionales, gracias a su sabor único y sus propiedades nutricionales. En los últimos cinco años, las exportaciones frutícolas colombianas en general han experimentado un crecimiento acumulado del 30%, lo que refleja el creciente interés global por la diversidad de la oferta agrícola del país.