Esta semana, la reconocida cadena de comida rápida Pollo Stop se encuentra en el centro de la atención al enfrentar un grave problema económico. Con 14 sucursales en Chile, la situación de la marca, perteneciente al holding Unifood, es crítica, ya que estaría al borde de la quiebra tras acogerse a un proceso de reorganización concursal. Este procedimiento busca evitar su cierre definitivo, al tiempo que la empresa intenta cumplir con las cuotas necesarias para saldar sus deudas con los acreedores.
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Recentemente, se supo que Pollo Stop no es la única afectada en la industria. La sociedad Cuatro SpA, que opera los locales de Pedro, Juan y Diego (PJ $ D), también incumplió su acuerdo de reorganización, lo que complicó aún más el panorama del sector de comida rápida en el país. Esta situación refleja una tendencia preocupante en un rubro que ha enfrentado serias dificultades en los últimos años.
Pedro Juan y Diego también podría enfrentar la quiebra
En septiembre de 2023, Pollo Stop inició su proceso de reorganización, donde se dio a conocer que acumulaba deudas por un total de $17.100 millones. A pesar de contar con 58 locaciones en principales centros comerciales y emplear a 640 trabajadores, la firma ha enfrentado obstáculos financieros significativos que han repercutido en su operación y rentabilidad.
La última información sobre la situación de Pollo Stop fue proporcionada por el interventor Enrique Ortiz, quien comunicó al superintendente de Insolvencia y Reemprendimiento, Hugo Sánchez, que la empresa no cumplió con el pago correspondiente a la cuota del 28 de diciembre del año pasado. En lugar de abonar los $27 millones pactados, solo logró pagar $9 millones, y también quedó pendiente el pago establecido para el 28 de enero de 2025.
Esta falta de cumplimiento podría derivar en acciones legales por parte de los acreedores, aumentando la presión sobre la empresa. La Superintendencia de Insolvencia deberá evaluar la situación actual y considerar que los acreedores pueden solicitar la liquidación forzosa de Pollo Stop si no se presenta una solución viable.
Por otro lado, Cuatro SpA, en 2023, había informado que su situación financiera se complicó debido a diversos factores ajenos a su operación, como el estallido social y el impacto de la pandemia. La empresa reportó que tres de sus locales fueron vandalizados durante las protestas, lo que afectó significativamente su desempeño.
La crisis que atraviesan Pollo Stop y Cuatro SpA pone de manifiesto los retos que enfrenta la industria de comida rápida en Chile, donde la combinación de deudas acumuladas y circunstancias externas desfavorables ha puesto en jaque a varias marcas.
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Los próximos meses serán cruciales para determinar el futuro de estas empresas, ya que tendrán que buscar alternativas efectivas para superar sus problemas financieros o arriesgarse a un cierre definitivo en un sector que, hasta hace poco, parecía sólido y en crecimiento.