BYD enfrenta desafíos laborales en Brasil sin desviarse de su meta de producción de vehículos eléctricos, la multinacional china BYD Co., reconocida como uno de los fabricantes de vehículos eléctricos más grandes del mundo, ha reiterado su compromiso de iniciar la producción en su nueva planta en Brasil para finales de 2025, a pesar de las acusaciones de abuso laboral que involucran a uno de sus subcontratistas clave. Este proyecto, anunciado como una de las expansiones más ambiciosas de la empresa fuera de Asia, enfrenta desafíos que podrían impactar no solo el cronograma de construcción, sino también la reputación global de la marca.
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El Contexto de las Acusaciones
En diciembre de 2024, las autoridades laborales brasileñas identificaron prácticas laborales abusivas en la obra de construcción liderada por Jinjiang Construction Brazil Ltd., un subcontratista contratado por BYD para trabajar en su planta ubicada en Camaçari, estado de Bahía. Según las investigaciones, 163 trabajadores estaban sometidos a condiciones laborales consideradas análogas a la esclavitud. Estas condiciones incluían alojamientos precarios, una cafetería inadecuada y la falta de medidas de seguridad laboral adecuadas.
El sindicato Sindticcc había alertado previamente sobre las irregularidades en las instalaciones desde marzo de 2024, e informó de accidentes laborales, incluida la amputación de un dedo de un trabajador. Estas denuncias culminaron con la intervención de la Fiscalía Laboral en diciembre, que cerró partes del proyecto y rescindió el contrato de Jinjiang.
A pesar de esta situación, Tyler Li, presidente de BYD Brasil, aseguró que la compañía está tomando medidas decisivas para abordar los problemas y minimizar el impacto en el cronograma de producción.
Compromiso de BYD con la Producción en Brasil
Li confirmó que la construcción del edificio principal para el ensamblaje final de los vehículos está completada en un 80%. Este avance permite a BYD mantener su objetivo de comenzar la producción inicial a finales de 2025. Aunque el área donde Jinjiang estaba realizando trabajos de movimiento de tierra y construcción de estructuras de hormigón fue cerrada, BYD ha decidido contratar a una nueva empresa brasileña para continuar con las obras.
Además, la empresa anunció la creación de un comité de cumplimiento para garantizar el respeto a las leyes laborales brasileñas. Este comité, liderado por Li, incluirá a empleados de BYD y consultores externos que supervisarán las operaciones en Brasil.
Impacto en los Planes de Expansión
Brasil es el mayor mercado de BYD fuera de Asia, y la planta en Camaçari está diseñada para ser la primera instalación de producción de vehículos eléctricos de la compañía fuera de su continente de origen. Con una capacidad inicial de 150,000 vehículos al año, se espera que esta cifra se duplique a 300,000 unidades en los siguientes dos años.
Sin embargo, este proyecto no solo busca consolidar la presencia de BYD en América Latina, sino también posicionarse frente a competidores globales en un mercado creciente de vehículos eléctricos. A pesar de los contratiempos, Li afirmó que la empresa está comprometida al 100% con encontrar soluciones que respeten las regulaciones brasileñas y garanticen el bienestar de todos los involucrados.
Implicaciones para la Reputación de BYD
El incidente podría tener repercusiones negativas para BYD en términos de reputación global, especialmente en un contexto donde la sostenibilidad y la responsabilidad social corporativa son aspectos cada vez más relevantes para los consumidores. Además, las declaraciones del portavoz de BYD en China, quien describió las acusaciones como una campaña de desprestigio, han generado polémica, contrastando con el enfoque conciliador de la filial brasileña.
El director ejecutivo de BYD en Brasil ha subrayado que la empresa está comprometida con el cumplimiento de las normativas locales y trabaja estrechamente con las autoridades para rectificar los problemas detectados. Mientras tanto, la Fiscalía Laboral continúa evaluando las irregularidades mediante informes de inspección, y se espera que las conversaciones con BYD y otros implicados sigan avanzando.
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El Futuro de BYD en Brasil
Aunque los desafíos son significativos, el potencial de crecimiento en el mercado brasileño es una motivación clave para BYD. Brasil, con su creciente interés en la transición hacia la movilidad eléctrica, representa una oportunidad estratégica para la empresa. Además, la planta en Camaçari tiene el potencial de servir como un hub de exportación para otros mercados en América Latina.
Con el cambio de subcontratista y las medidas adicionales de cumplimiento, BYD espera recuperar el ritmo de construcción y fortalecer su posición en la región. El éxito de este proyecto no solo dependerá de su capacidad para superar las dificultades actuales, sino también de su habilidad para demostrar un compromiso genuino con los principios de sostenibilidad y responsabilidad social.