Brasil reactiva debate sobre la tributación de las Big Tech y busca un diálogo para superar obstáculos, el gobierno brasileño ha decidido retomar la discusión sobre la tributación de las grandes empresas tecnológicas, conocidas como Big Tech, con el objetivo de avanzar en el Congreso Nacional durante el presente año. El ministro de Comunicaciones de Brasil, Juscelino Filho, anunció esta medida en una rueda de prensa realizada en el marco del Mobile World Congress (MWC) 2025.
El funcionario explicó que la propuesta, discutida en conjunto con el Ministerio de Hacienda liderado por Fernando Haddad, no se presentó en 2024 debido a que la prioridad del gobierno fue la reforma tributaria. Sin embargo, destacó que ya se han llevado a cabo reuniones con el equipo económico para reactivar el debate y llevar la iniciativa al Congreso lo antes posible. «La articulación política estará bajo la dirección de la ministra de la Secretaría de Relaciones Institucionales, Gleisi Hoffmann, y se impulsará después del carnaval», declaró el ministro.
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Resistencias y Búsqueda de Consensos
El ministro de Comunicaciones reconoció que las empresas tecnológicas han mostrado resistencia a la medida, pero aseguró que el gobierno está comprometido con un diálogo abierto para viabilizar la propuesta. Según Filho, ya ha recibido personalmente a representantes de las principales plataformas digitales en su despacho, aunque evitó mencionar nombres específicos. «Estamos construyendo puentes y explicando cómo esta contribución puede generar beneficios para todos», señaló.
La propuesta busca establecer un marco regulatorio que garantice una tributación justa para estas empresas, que generan miles de millones de dólares en ingresos a través de sus operaciones en Brasil. El gobierno argumenta que, al contribuir fiscalmente, las Big Tech podrían impulsar la inclusión digital y fomentar el desarrollo económico del país.
Impacto de la Regulación en el Entorno Político Internacional
El ministro minimizó las tensiones políticas derivadas de los recientes conflictos entre el Supremo Tribunal Federal (STF) y actores internacionales, asegurando que estos episodios no afectan el proceso legislativo interno. «Este no es un enfrentamiento nuevo. Forma parte del juego político», comentó. Además, enfatizó que el Congreso brasileño es un espacio naturalmente desafiante para cualquier agenda regulatoria, por lo que el diálogo con todos los sectores será clave para lograr avances.
Una de las principales preocupaciones proviene de las amenazas del expresidente estadounidense Donald Trump, quien ha manifestado su intención de tomar represalias contra los países que impongan tarifas o regulaciones adicionales a las Big Tech. No obstante, Filho defendió la postura brasileña, argumentando que el país tiene pleno derecho a exigir una «contribución justa» de estas empresas, considerando la magnitud de sus operaciones en el mercado local.
«Brasil es uno de los principales mercados para estas compañías. En lugar de ver la regulación como una barrera, deberían comprender que, al contribuir con el país, también están fortaleciendo su propia presencia en nuestra economía», agregó el ministro.
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Un Enfoque Integral para una Regulación Sostenible
Filho enfatizó que el gobierno brasileño está comprometido con un enfoque equilibrado y pragmático. «No buscamos obstaculizar el crecimiento de las Big Tech, sino asegurarnos de que su participación en el mercado también genere beneficios para la sociedad brasileña», aseguró. Además, recalcó que la recaudación obtenida podría destinarse a proyectos de inclusión digital, expansión de la infraestructura de conectividad y educación tecnológica.
La reactivación del debate sobre la tributación de las Big Tech en Brasil refleja un esfuerzo por equilibrar la innovación tecnológica con la justicia fiscal. A medida que el gobierno intensifica el diálogo con los actores clave, el resultado de esta iniciativa podría sentar un precedente en América Latina sobre cómo regular a las grandes plataformas digitales de manera equitativa y sostenible.
