Brasil enfrenta el desafío de los vehículos eléctricos chinos, fabricantes locales exigen mayor protección arancelaria, en el creciente mercado automotriz brasileño, la llegada masiva de vehículos eléctricos chinos ha encendido las alarmas entre los fabricantes locales. La Asociación Nacional de Fabricantes de Vehículos Automotores (Anfavea) ha solicitado formalmente al Gobierno de Brasil la restitución de un arancel del 35% sobre los automóviles eléctricos e híbridos importados desde China. La medida busca nivelar el terreno de juego y evitar un impacto negativo en la industria automotriz nacional, que ha comenzado a recuperarse tras años de crisis económica y los efectos de la pandemia de COVID-19.
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El Desafío de la Industria Automotriz Brasileña
Brasil se ha consolidado como un mercado clave en la industria automotriz global, ocupando el octavo lugar en producción mundial con 2,5 millones de unidades ensambladas en 2024. Sin embargo, la apertura de su mercado a importaciones chinas sin una barrera arancelaria significativa ha generado inquietud entre los fabricantes locales. Con restricciones y elevados impuestos que limitan sus exportaciones a Estados Unidos y la Unión Europea, las automotrices chinas han redirigido sus ventas hacia Brasil, aprovechando las condiciones favorables.
La situación se ha visto agravada por la reciente llegada de 5.524 vehículos importados por la firma china BYD al puerto brasileño de Aracruz. En total, los fabricantes chinos ya cuentan con un inventario de 40.000 unidades en Brasil, lo que, según Anfavea, representa una amenaza para la sostenibilidad de la industria local.
El Rol de los Aranceles en la Competitividad
Desde julio de 2024, el Gobierno de Brasil redujo los aranceles sobre los vehículos eléctricos e híbridos de la siguiente manera:
- Vehículos eléctricos: del 35% al 18%.
- Híbridos plug-in: del 35% al 20%.
- Híbridos convencionales: del 35% al 25%.
Si bien la medida buscaba incentivar la adopción de tecnologías limpias, Anfavea advierte que la falta de protección arancelaria puede perjudicar a la industria automotriz local. En comparación, Estados Unidos y Canadá imponen un arancel del 100% sobre los vehículos eléctricos chinos, mientras que la Unión Europea aplica un 48%.
Las cifras reflejan un crecimiento exponencial de las importaciones brasileñas de autos chinos, que se triplicaron en 2024, alcanzando las 120.000 unidades. Este escenario podría desincentivar la inversión local, a pesar de los anuncios de los fabricantes sobre planes de inversión por 180.000 millones de reales (aproximadamente 31.270 millones de dólares) para desarrollar y producir vehículos eléctricos en Brasil.
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Inversión en Producción Local y Retos Futuros
A pesar de la preocupación por la competencia desleal, el mercado brasileño sigue siendo atractivo para las automotrices chinas. BYD está construyendo una planta en el estado de Bahía con capacidad para producir hasta 300.000 vehículos anuales. Sin embargo, Anfavea ha alertado que algunas empresas extranjeras han postergado sus planes de producción en Brasil debido a la incertidumbre sobre la política arancelaria.
El Gobierno brasileño enfrenta un desafío complejo: equilibrar el incentivo a la movilidad eléctrica con la protección de su industria nacional. El debate sobre la política arancelaria continuará siendo un tema central en la estrategia de desarrollo económico y sustentabilidad del país.