Argentina revierte su superávit comercial con Brasil, factores y perspectivas del déficit en agosto, tras cinco meses de superávit en el comercio bilateral con Brasil, Argentina registró un déficit de 15 millones de dólares, lo que pone de relieve la fluctuante naturaleza de las relaciones comerciales entre los dos gigantes sudamericanos. Aunque las exportaciones argentinas hacia Brasil aumentaron en términos interanuales, este crecimiento fue más moderado que en meses anteriores. Simultáneamente, las importaciones desde Brasil disminuyeron, pero a un ritmo más lento que en meses previos, lo que contribuyó a la reversión del superávit.
Principales razones detrás de esta situación y examina los sectores que han sido clave para el déficit registrado, así como las perspectivas futuras para el comercio bilateral.
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El Contexto General del Comercio Bilateral
El comercio entre Argentina y Brasil en agosto de 2024 ascendió a 2.351 millones de dólares, una cifra que, aunque significativa, representa una disminución del 8,5% en comparación con el mismo mes del año anterior. A pesar de esta caída, la contracción del comercio fue menor en comparación con los tres meses anteriores. En julio, el descenso fue del 9,5%, en junio del 31,6% y en mayo del 28,1%. Esta tendencia refleja una relativa estabilización en el comercio bilateral, aunque todavía se mantiene por debajo de los niveles de 2023.
El déficit registrado en agosto se produjo a pesar de un aumento en las exportaciones argentinas hacia Brasil, que crecieron un 2,5% en comparación con el mismo mes del año anterior. Sin embargo, este crecimiento fue mucho más moderado que el registrado en julio, cuando las exportaciones aumentaron un 20%. Al mismo tiempo, las importaciones desde Brasil disminuyeron un 17,2% interanual, pero esta caída fue menor que la observada en meses previos, lo que contribuyó a la reversión del superávit.
Importaciones desde Brasil: Sectores Clave
Las importaciones argentinas desde Brasil en agosto alcanzaron los 1.182,8 millones de dólares, lo que representa una disminución del 17,2% en comparación con el mismo mes del año anterior. Aunque esta cifra sigue siendo significativa, es notablemente menor que la caída del 27,8% registrada en julio. Esta mejora se debió en parte al desempeño positivo de ciertos sectores, como el automotriz y el energético.
En el sector automotriz, las importaciones de vehículos automotores de pasajeros aumentaron un 92% en términos interanuales, alcanzando los 184,9 millones de dólares, lo que representa el 15,6% del total de las importaciones desde Brasil. También se registró un aumento del 40,8% en las importaciones de vehículos automotores para el transporte de mercancías, que totalizaron 49,2 millones de dólares en agosto. Sin embargo, las importaciones de partes y accesorios de vehículos automotores cayeron un 25,6%, lo que refleja una tendencia mixta en este sector clave para el comercio bilateral.
En el sector energético, se observó un aumento significativo en las importaciones de aceites combustibles de petróleo o minerales bituminosos, que crecieron un 688,6% en términos interanuales, alcanzando los 53,8 millones de dólares. Este aumento es particularmente notable, ya que estos productos pasaron de representar el 0,5% del total de las importaciones a un 4,5% en agosto. Sin embargo, las importaciones de energía eléctrica se redujeron en un 62%, lo que refleja la volatilidad en el comercio de productos energéticos.
El sector agrícola, por su parte, experimentó una caída significativa en las importaciones de soja, que disminuyeron un 100% en comparación con agosto de 2023. Esto se debe a que la sequía que afectó a Argentina el año pasado ya no está presente, lo que reduce la necesidad de importar soja desde Brasil.
Exportaciones Argentinas hacia Brasil
Las exportaciones argentinas hacia Brasil en agosto totalizaron 1.168 millones de dólares, lo que representa un aumento del 2,5% en comparación con el mismo mes del año anterior. Aunque este crecimiento es positivo, es mucho más moderado que el incremento del 20% registrado en julio, lo que sugiere una desaceleración en el ritmo de crecimiento de las exportaciones.
El sector agroindustrial fue uno de los más destacados en agosto, con un aumento del 53,7% en las exportaciones de trigo y centeno sin moler, que totalizaron 52 millones de dólares. También se registró un aumento del 48,4% en las exportaciones de queso y leche cuajada, que alcanzaron los 23,7 millones de dólares. En lo que va del año, las exportaciones de trigo y centeno han aumentado un 29,9%, mientras que las de queso y leche cuajada han crecido un 35,7%.
El sector automotriz también mostró un desempeño positivo en agosto, con un aumento del 27,5% en las exportaciones de partes y accesorios de vehículos automotrices, que totalizaron 35 millones de dólares. Las exportaciones de vehículos automotores de pasajeros crecieron un 19,3%, alcanzando los 249 millones de dólares, mientras que las exportaciones de vehículos automotores para el transporte de mercancías aumentaron un 12,7%, totalizando 286,8 millones de dólares.
Otro sector que destacó en agosto fue el de las exportaciones de aluminio, que crecieron un 224,7% en comparación con el mismo mes del año anterior, alcanzando los 38,5 millones de dólares. En el acumulado del año, las exportaciones de aluminio han aumentado un 78,7%, lo que refleja la fuerte demanda de este mineral en Brasil.
Perspectivas para el Futuro
A medida que Argentina y Brasil continúan ajustando sus relaciones comerciales, las perspectivas para los próximos meses sugieren una mayor volatilidad. Se espera que las importaciones desde Brasil se mantengan comprimidas debido a la desaceleración de la actividad económica en Argentina, aunque la reciente apreciación del real brasileño y la reducción del impuesto PAIS podrían estimular la demanda de importaciones en el corto plazo.
Por otro lado, las perspectivas de crecimiento de la economía brasileña, que se espera que crezca en torno al 2% en 2024, podrían influir en el comercio bilateral. Sin embargo, la alta inflación en Brasil y la depreciación del real podrían limitar la capacidad de crecimiento de las exportaciones argentinas hacia ese país.
En este contexto, las relaciones comerciales entre Argentina y Brasil seguirán siendo una pieza clave en la economía de ambos países, aunque con desafíos significativos en el horizonte. El comercio bilateral ha caído en los últimos 15 años, y aunque las fluctuaciones recientes son parte de un ciclo económico más amplio, las autoridades de ambos países deberán trabajar en conjunto para revitalizar estas relaciones y aprovechar las oportunidades de crecimiento en sectores clave como el automotriz, el energético y el agroindustrial.
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El déficit comercial de Argentina con Brasil en agosto de 2024 marca un punto de inflexión tras cinco meses de superávit. A pesar de la caída en las importaciones y el crecimiento moderado de las exportaciones, la economía argentina enfrenta desafíos importantes en su relación comercial con Brasil. Las perspectivas para el futuro son mixtas, con factores como la apreciación del real brasileño y la desaceleración económica en ambos países jugando un papel crucial en el desarrollo de su comercio bilateral.
