El Gobierno argentino se encuentra sumamente molesto con carnicerías y supermercados debido al alarmante aumento de los precios de la carne vacuna, que registró un incremento del 40,9% en diciembre y acumula un asombroso 307,3% en el último año. Este fenómeno ha sido especialmente notorio en ciudades clave como Rosario, Córdoba y el Área Metropolitana de Buenos Aires (AMBA).
El Instituto de Promoción de la Carne Vacuna Argentina ha presentado un informe que no ha sido bien recibido por el gobierno, ya que revela cifras alarmantes en la subida de los precios de la carne en diferentes regiones. En el AMBA, la subida de los cortes fue del 40,9% en diciembre y del 307,3% interanual; en Rosario, se registró un aumento del 40,7% intermensual y del 304,4% interanual; y en Córdoba, un incremento del 36,1% intermensual y del 298% interanual.
Al considerar estas tres plazas, se observa que el precio del pollo fresco experimentó una variación del 21,7% en diciembre de 2023 respecto al mes anterior. Comparado con los valores de diciembre de 2022, el incremento fue aún más significativo, llegando al 239,6%. En el caso del pechito de cerdo, los precios aumentaron un 39% con respecto al mes anterior y un impresionante 254,5% en comparación con diciembre de 2022.
El informe también destaca que los precios de la carne vacuna tuvieron variaciones en diferentes niveles socioeconómicos. En los puntos de venta que atienden en barrios de nivel socioeconómico alto, los precios aumentaron un 36,8%, en aquellos que operan en el nivel socioeconómico medio, un 41,7%, y en los que atienden al nivel socioeconómico bajo, los precios también aumentaron un 41,7%.
En cuanto a los lugares de expendio, se observaron diferencias notables durante el último mes de 2023. Los precios en las carnicerías aumentaron un 47,9% con respecto al mes anterior, mientras que en los supermercados el aumento fue del 25,3%.
En relación con las diferentes categorías de hacienda, se registraron variaciones en los precios de la carne de novillito (38%), la de novillo (40,3%), y la de vaquillona y ternera (46,4%) en comparación con los valores de noviembre de 2023. En promedio, el precio de la categoría liviana de consumo minorista aumentó un 409% en comparación con el mes anterior.
Este aumento desmedido de los precios de la carne ha generado un malestar generalizado, no solo en el gobierno sino también en el mercado consumidor. Contrariamente a las expectativas de aumentos estacionales durante las fiestas, los precios de la hacienda experimentaron caídas en el Mercado de Cañuelas en la última semana, reflejando la marcada disminución del consumo. En el pico de la cuarta semana de diciembre, cuando el ganado en pie alcanzó los $1.900 por kilo, la hacienda retrocedió a niveles de $1.400 esta semana. Se espera que el impacto en las carnicerías sea evidente en los próximos días, según indicaron fuentes de las cadenas comerciales.
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