En Argentina, los pagos con tarjeta de crédito suben un 8,8 %
En un contexto de inflación persistente y desafíos económicos, las tarjetas de crédito continúan consolidándose como una herramienta clave para los consumidores argentinos. Durante agosto de 2024, las operaciones realizadas con este medio de pago en pesos alcanzaron los 10 795 011 millones de pesos, marcando un incremento del 8,8 % respecto al mes anterior, según un informe de First Capital Group. Este crecimiento no solo superó la inflación estimada para el período, sino que también registró un aumento interanual del 192,5 %, aunque aún por debajo del índice inflacionario acumulado en el último año.
El auge en el uso de tarjetas de crédito refleja el esfuerzo de los consumidores por mantener su nivel de consumo en un entorno económico desafiante. Este crecimiento estuvo acompañado por un notable incremento en los préstamos personales, que subieron un 20,4 % en el mismo mes. Según Guillermo Barbero, socio de First Capital Group, este fenómeno podría estar relacionado con el reemplazo de financiamiento tomado anteriormente.
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“Parte del boom de los préstamos personales al que asistimos seguramente se está utilizando para reemplazar el financiamiento tomado anteriormente. Como mencionamos en otras oportunidades, ambas carteras tienden a converger en el largo plazo”, explicó Barbero.
El uso de la tarjeta de crédito sigue liderando como el método de pago más popular en el comercio electrónico argentino. Según un informe de Tiendanube, el 58 % de las compras realizadas en su plataforma durante el primer semestre de 2024 fueron pagadas con este medio. Este dato subraya el papel central de las tarjetas en el ecosistema digital, donde la facilidad de uso y las opciones de financiación son determinantes para los consumidores.
En comparación, las transferencias bancarias ocuparon el segundo lugar, con un 16 % de participación, impulsadas por promociones específicas diseñadas para fomentar su adopción. Otros métodos, como la tarjeta de débito y el dinero en cuenta, representaron el 7 % y el 8 %, respectivamente, dejando en claro que las preferencias de los consumidores siguen inclinándose hacia las opciones que ofrecen mayor flexibilidad.
En términos de financiación, la mayoría de los consumidores argentinos optaron por pagar en una sola cuota, una modalidad elegida por el 59 % de los usuarios. Esto sugiere una tendencia hacia el consumo responsable y el intento de evitar cargos adicionales por intereses.
Otras opciones de financiación también mostraron un uso considerable:
Tres cuotas, elegidas por el 28 % de los usuarios.
Seis cuotas, con una participación del 12 %.
Doce cuotas o más, que representaron apenas el 1 % de las operaciones.
Esta distribución refleja un equilibrio entre la preferencia por minimizar costos financieros y la necesidad de dividir los pagos en plazos más largos para adquisiciones de mayor valor.
¿Qué impulsa el crecimiento del uso de tarjetas?
El aumento en las operaciones con tarjetas de crédito puede atribuirse a varios factores:
Inflación: Los consumidores buscan financiar sus compras en cuotas como una estrategia para contrarrestar el impacto de la inflación.
Promociones y descuentos: Las entidades bancarias y emisoras de tarjetas han lanzado campañas promocionales atractivas, especialmente en sectores como el retail y el comercio electrónico.
Facilidad de uso: En un mundo cada vez más digitalizado, las tarjetas de crédito ofrecen rapidez y comodidad en las transacciones.
Ampliación de límites: Muchas entidades han ajustado los límites de crédito para adaptarse al aumento de precios, lo que permite a los usuarios mantener su nivel de consumo.
Un sistema de pagos en evolución
Si bien las tarjetas de crédito lideran el mercado, el sistema de pagos en Argentina está en constante evolución. La adopción de transferencias bancarias, impulsada por promociones y mejoras en la experiencia del usuario, muestra un crecimiento sostenido. Asimismo, el uso de billeteras digitales y otros métodos innovadores continúa ganando terreno, especialmente entre las generaciones más jóvenes.
La digitalización de los pagos no solo transforma la manera en que los consumidores realizan sus compras, sino que también representa una oportunidad para el desarrollo económico. Al fomentar la inclusión financiera, estos avances permiten a más personas acceder a herramientas que facilitan su participación en la economía formal.
A pesar del crecimiento registrado, el uso de tarjetas de crédito enfrenta desafíos importantes. Por un lado, la alta inflación reduce el poder adquisitivo de los consumidores, limitando su capacidad para asumir nuevas deudas. Por otro lado, las tasas de interés, que se mantienen en niveles elevados, pueden desalentar el uso de la financiación a largo plazo.
Sin embargo, estas limitaciones también representan una oportunidad para que las entidades financieras innoven en sus productos y servicios. La personalización de las ofertas, el desarrollo de programas de fidelización y la mejora de la experiencia del cliente son algunas de las estrategias que podrían impulsar aún más el uso de tarjetas de crédito en Argentina.
El panorama económico de Argentina plantea incertidumbres, pero el crecimiento en el uso de tarjetas de crédito durante agosto de 2024 demuestra la resiliencia de los consumidores y la capacidad del sistema financiero para adaptarse a los cambios.
En el corto plazo, se espera que las tarjetas de crédito sigan siendo una herramienta esencial para los argentinos, especialmente en el comercio electrónico y las compras de bienes duraderos. A largo plazo, la diversificación de los métodos de pago y la adopción de tecnologías innovadoras podrían redefinir el mercado, ofreciendo nuevas oportunidades tanto para los consumidores como para las empresas.
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El crecimiento del 8,8 % en las operaciones con tarjetas de crédito durante agosto refleja una tendencia positiva en el mercado financiero argentino, impulsada por la necesidad de financiar el consumo en un entorno inflacionario. A medida que las entidades financieras y las empresas de comercio electrónico continúan innovando, las tarjetas de crédito se mantienen como un pilar fundamental en el sistema de pagos del país.