En la década de los 80, el Drugstore era el epicentro de la moda y la cultura en Santiago. Sin embargo, en el siglo XXI, se ha convertido en una «burbuja» dentro de Providencia, enfrentando desafíos como el comercio ambulante, el impacto del Costanera Center, las secuelas del estallido social y la pandemia. Sergio Mujica Charme, socio del Drugstore, comparte la fórmula que les ha permitido no solo sobrevivir, sino también prosperar en el competitivo mundo del comercio de calle.
Cuando Sergio Mujica ingresó al Drugstore con el 50% de la propiedad y la gestión, tomó una decisión audaz junto a los socios fundadores: definir el proyecto como un espacio único, una categoría propia que se distanciara de la idea convencional de un centro comercial. La estrategia fue clara desde el principio: no serían un mall tradicional.
Esta apuesta, aunque arriesgada, demostró ser acertada al enfrentar la construcción del imponente Costanera Center, que estaba a solo unas cuadras de distancia. «Tomamos la decisión de nunca tener tiendas de grandes marcas o grandes superficies. Queríamos diferenciarnos y esa fue la clave», explica Mujica.
La primera acción estratégica fue atraer operadores alineados con esta visión. Se acercaron a escuelas de diseño, ofrecieron charlas para motivar a jóvenes emprendedores a establecerse en el Drugstore. «Hoy en día, el Drugstore es un lugar deseado por los emprendedores. Se ha convertido en un espacio donde la gente prueba y muestra sus productos», destaca Mujica.
Esta diferenciación se convirtió en su escudo contra la apertura del Costanera Center. Mientras otras tiendas y marcas en la Avenida Providencia se vieron obligadas a cerrar o trasladarse al centro comercial, el Drugstore mantuvo su esencia única. «Nos afectó al principio, cuando había mucha curiosidad por el Costanera Center, notamos una disminución en las visitas, pero las ventas no cayeron porque nuestra oferta es diferente», añade.
La visión del Drugstore como un espacio alternativo de comercio y cultura ha sido exitosa. Mientras los malls atraen con entretenimiento, el Drugstore se centra en un público que busca experiencias diferentes. «Organizamos lanzamientos de libros, exposiciones y utilizamos activamente las redes sociales, lo que nos ha permitido tener miles de seguidores», destaca Mujica.
Esta distinción ha traducido su éxito en cifras sólidas. Actualmente, no hay locales vacíos y hay una lista de espera para unirse al Drugstore. El espacio ha evolucionado, sumando 105 locales y expandiéndose a nuevas áreas. «Tratamos a los operadores de manera colaborativa. Aquí construimos con ellos, les ayudamos y atendemos sus requerimientos», comenta Mujica.
Sin embargo, su camino no ha estado exento de desafíos. El terremoto de 2010, la inundación de Providencia en 2016, el estallido social en 2019 y la pandemia en 2020 pusieron a prueba la resiliencia del Drugstore. Pero cada vez, lograron sobreponerse, adaptarse y seguir adelante.
Mujica destaca que la crisis actual del retail no es una crisis en sí misma, sino más bien una recomposición. En su opinión, las tiendas grandes como Falabella enfrentan desafíos relacionados con la evolución del comercio electrónico y la necesidad de adaptarse a las preferencias cambiantes de los consumidores. «Creo que hace falta una readecuación de las grandes tiendas. Las tiendas más pequeñas se han recuperado mucho más fácilmente», comenta.
El Drugstore sigue enfrentando nuevas amenazas, como el auge del comercio ambulante y la presencia del MUT, un concepto que podría competir con su propuesta. Sin embargo, Mujica mantiene la confianza en que estos cambios también pueden ser oportunidades. «La única burbuja en Providencia es el Drugstore», afirma.
En resumen, la historia del Drugstore en Providencia es un testimonio de adaptabilidad, visión y resiliencia. Su fórmula única, centrada en la diferenciación y la colaboración con los operadores, ha demostrado ser un éxito en un entorno comercial en constante cambio. A medida que enfrentan nuevas amenazas, el Drugstore sigue siendo un faro de innovación y resistencia en el panorama comercial de Santiago.
Con información de La Tercera